“¡El fin del otoño acongoja y me hace llorar, ay!”, por La Tia Julia
Tía Julia: No sé cuál sería nuestro destino en el cosmos sin sus acertados consejos, tan brillosos como la calva de un Pastor a quien esa gente mala de la competencia lo llaman cabeza de rodilla o resbalón de piojos. Es tan feo esto de los sobrenombres, apodos y remoquetes, ¡pero el pueblo no aprende!