La decisión de la Corte Suprema de desconocer el derecho constitucional al aborto da una nueva dimensión al debate de cara a las elecciones de mitad de término, en las que los candidatos deberán ofrecer soluciones para las mujeres y niños más vulnerables.
Rick Scott, quien encabeza el comité de campaña de los republicanos en el Senado, dijo que los legisladores tienen ahora la responsabilidad de “hacer todo lo que esté en nuestro poder para satisfacer las necesidades de las mujeres que enfrentan dificultades y a sus familias para que elijan la vida”.
Es una admisión de que, por más que la inflación y los altos precios de la gasolina sean una pesada carga para el presidente Joe Biden y los demócratas, este delicado tema puede complicar las expectativas de los republicanos de tomar el control del Congreso.
El fallo de la Corte podría aumentar la incertidumbre en contiendas reñidas porque el aborto es también un tema económico para mucha gente. La secretaria del tesoro Janet Yellen dijo el mes pasado que la eliminación del derecho al aborto “podría tener efectos muy nocivos para la economía y haría retroceder a las mujeres varias décadas”.
Los candidatos demócratas dicen que sus rivales republicanos son advenedizos que no ofrecen soluciones serias.
“Es bastante cínico decir que quieren tomar medidas ahora”, expresó la representante demócrata Suzan DelBene. “Si es una prioridad, debió haberlo sido siempre. Las acciones dicen mucho más que las palabras”.
Los líderes republicanos se han opuesto en general a la expansión de beneficios tributarios por cada niño, diciendo que alientan a la gente a quedarse en su casa en lugar de trabajar, a pesar de la evidencia que indica lo contrario. Legisladores republicanos afirman que las propuestas demócratas que contemplan licencias familiares pagas –algo que tienen otras naciones desarrolladas– limitaría las opciones de las familias y afectaría mucho a los pequeños negocios.
En el 2017, los republicanos de la Cámara de Representantes votaron a favor de eliminar el programa de salud conocido como “Obamacare” y reemplazarlo con medidas que hubieran hecho que los beneficios por la maternidad fuesen opcionales.
“La conducción republicana no solo decidió alinearse con la radical ruptura de la Corte Suprema con los precedentes al disponer una prohibición del aborto a nivel nacional, sino que también se ha pasado años tratando de hacer que la paternidad resulte más costosa para las familias de clase media”, manifestó Andrew Bates, subsecretario de prensa de la Casa Blanca.
Un análisis de la Associated Press comprobó que los estados con las leyes sobre el aborto más estrictas –a menudo gobernados por republicanos– generalmente ofrecen mucho menos apoyo a los padres y los hijos, lo que produce más pobreza y más trastornos de salud. En respuesta al análisis de la AP, varios legisladores de estados conservadores dijeron que las mujeres pueden dar a sus bebés en adopción y que apoyarían un aumento de fondos para los programas de hogares de crianza.