Las delegaciones de México y Estados Unidos, concluyeron que para que se logren los objetivos trazados en el Dialogo Económico de Alto Nivel (DEAN) y el instrumento bilateral, se convierta en la plataforma que permita la recuperación económica post-pandemia mediante el impulso de acciones prioritarias puntuales y de carácter bilateral, que partan de las coincidencias y que permitan sumar a los esfuerzos que ambos gobiernos realizan en el marco del T-MEC y los demás mecanismos de colaboración bilateral ya existentes, se requerirá como lo menciona el Comunicado Oficial: “De una estrecha comunicación y colaboración con el sector privado, academia y sociedad civil para considerar su retroalimentación en el progreso de las iniciativas existentes y la inclusión de otras futuras”.
Las delegaciones conversaron sobre los cuatro pilares acordados, los cuales enmarcan la visión estratégica que ambos países otorgarán a su relación económica durante los próximos años: i) Reconstruir juntos; ii) Promover el desarrollo económico, social y sustentable en el sur de México y Centroamérica; iii) Asegurar las herramientas para la prosperidad futura y iv) Invertir en nuestro pueblo.
Sobre el primer pilar, Reconstruir juntos, México y EE. UU. crearán un Grupo de Trabajo Bilateral en Cadenas de Suministro para identificar áreas de complementariedad en las cadenas nuevas y existentes, en aras de mantener su correcto funcionamiento ante posibles disrupciones, incrementar la competitividad, atraer líneas de producción de otras regiones en el mundo y reducir vulnerabilidades en sectores críticos, apegándose a los intereses de cada país. También coincidieron en la importancia de contar con infraestructura fronteriza y procedimientos de facilitación comercial modernos, eficientes y seguros.
El segundo pilar, Promover el desarrollo económico, social y sustentable en el sur de México y Centroamérica, promoverá que EE. UU. brinde cooperación técnica para atender las causas estructurales de la emigración en el norte de Centroamérica. Particularmente, colaborará con el Gobierno de México en los programas de Sembrando Vida y Jóvenes Construyendo el Futuro en la región. Asimismo, las respectivas agencias de Estados Unidos implementarán actividades para desarrollar las cadenas de valor; por ejemplo, a través de la mejor vinculación entre productores agrícolas y consumidores o la creación de proyectos bancables que atraigan inversión privada. Ambos países colaborarán para fomentar el comercio y promover la inversión en proyectos productivos que fomenten el desarrollo regional.
Reconociendo la importancia de contar con un entorno digital seguro y fuerte, se acordó que el trabajo en torno al tercer pilar Asegurar las herramientas para la prosperidad futura se centre en mitigar las amenazas cibernéticas a las cadenas de suministro de manera coordinada y también mejorar el flujo de datos entre los dos países.
Ambos gobiernos comparten la prioridad de una economía más igualitaria, por lo que el cuarto pilar, Invertir en nuestro pueblo, se enfocará en brindar a poblaciones vulnerables como mujeres, juventudes, indígenas y LGBTQ+ capacitación en las habilidades necesarias para que sean competitivas en la economía del siglo XXI. Igualmente, conscientes que las pymes son la base de nuestra actividad económica, se colaborará para integrarlas en las cadenas regionales de valor.
Se busca que el DEAN sea un mecanismo en constante evolución: los equipos técnicos trabajarán a lo largo del año en la implementación de las iniciativas y contará con una revisión semestral a nivel de subsecretarios o jefes de unidad y reuniones anuales a nivel secretario de Estado. Se insistió en la importancia del intercambio en educación financiera, científica y humanista y en la preparación y capacitación hacia los empleos del futuro.
Opinión del Experto
Para la Diputada Amalia García, de Movimiento Ciudadano, con una amplia trayectoria en la vida política nacional, como integrante del Consejo Mexicano de Asuntos Internacionales (COMEXI); Secretaria de Trabajo y Fomento al Empleo de la Ciudad de México, de 2015 a 2018; presidio el Consejo Parlamentario Regional de las Migraciones – Centroamérica, México y el Caribe y la Comisión Interparlamentaria de Derechos Humanos del Foro de Presidentes Parlamentarios de México, Centroamérica y el Caribe, de 2012 – 2015, Gobernadora del Estado de Zacatecas de 2004 a 2010, Senadora de la Republica en 1997-1999; Diputada Federal en 1988 a 1991 y Presidenta de la Comisión de Asuntos Migratorios, e integrante de las Comisiones de Puntos Constitucionales y otras, del 2012 al 2015 e integrante del Grupo San Ángel- del que emanaron 20 Compromisos por la Democracia-, en los años 90, que desde la sociedad civil impulsaron la transición democrática de México, es imperativo el cambio de enfoque en la Gestión Migratoria para “sustituir la visión de seguridad nacional por el de seguridad humana desde el reconocimiento que es un fenómeno regional que tiene su causa en la desigualdad económica, social y de oportunidades y que su tratamiento debe ser regional con políticas consensadas entre los gobiernos de Mexico, Centroamérica y el Caribe y los Estados Unidos, atendiendo las causas que la originan”, cita del ensayo de la autora: “El Desafio de los Migrantes”. publicada por el Instituto de Investigaciones de la UNAM.
Para la Diputada Elvia Torres, que ostenta la representación binacional bajo la figura de Acción Afirmativa Migrante, también de Movimiento Ciudadano; considera que la nueva dinámica demográfica en los flujos exige reconfigurar nuevas políticas públicas ahora insuficientes de estas nuevas poblaciones, cuyas condiciones presentes dificultan su integración e impiden su contribución sustantiva a las dos sociedades, considera que para México como para Estados Unidos, la política de atención a la situación de los migrantes vulnerables tiene que ser más sistemática y sostenida, y debe extenderse más allá del acento de una posible regularización migratoria, de admisión y residencia para plantear temas como el trabajo, la educación, la salud, la seguridad personal, dado que esta población tiene una doble vulnerabilidad, aunque pueden ser más emprendedores, están marginados para el acceso a una educación y capacitación laboral que les permita competir por mejores salarios.