TORONTO (AP) — El líder de la provincia más poblada de Canadá, Ontario, anunció el lunes la cancelación del contrato con Starlink, la empresa de internet de Elon Musk, en respuesta a los aranceles del presidente estadounidense, Donald Trump.
Un alto funcionario del gobierno canadiense también reconoció que Canadá no está seguro de poder evitar los inminentes aranceles que entran en vigor el martes como lo hizo México, ya que siente que las reglas del juego cambian más para Canadá que para México. El funcionario, que habló bajo condición de anonimato, no estaba autorizado para hablar públicamente.
Trump y la presidenta mexicana Claudia Sheinbaum anunciaron el lunes una pausa de un mes en los aranceles para dar tiempo a más negociaciones. Casa Blanca.
Previamente, Trump publicó en redes sociales que habló con el primer ministro canadiense Justin Trudeau el lunes por la mañana y que charlaría con él nuevamente por la tarde. Tanto Canadá como México tenían planes de imponer sus propios aranceles en respuesta a las acciones de Estados Unidos, pero México detuvo sus planes por el momento.
Por su parte, el primer ministro de Ontario, Doug Ford, dijo además que también prohibirá a las empresas estadounidenses firmar contratos provinciales, firmó un acuerdo de 100 millones de dólares canadienses (68 millones de dólares) con la compañía de Musk en noviembre para ofrecer internet de alta velocidad en las zonas rurales y del norte de Ontario.
“Vamos a romper el contrato de la provincia con Starlink. Ontario no hará negocios con personas empeñadas en destruir nuestra economía”, indicó Ford. “El presidente Trump es la única persona a quien culpar. ¿Quizás Elon Musk puede llamar a su amigo? Esta es una de las consecuencias”.
Ford dijo que las empresas estadounidenses perderán “decenas de miles de millones de dólares” en nuevos ingresos como resultado de la respuesta de Ontario.
“Simplemente no vamos a usar empresas estadounidenses”, dijo Ford. “Y no importa si estamos construyendo un hospital, si estamos construyendo algo, si estamos construyendo una caseta para perros, quiero asegurarme de que estamos usando acero de Ontario, productos canadienses, madera canadiense, madera de Ontario, cualquier cosa”.
“No me importa si es un palillo. Necesitamos comprar de Canadá y Ontario”.
Ontario y otras provincias ya planeaban retirar las marcas de licores estadounidenses de los estantes de las tiendas gubernamentales. La Junta de Control de Licores de Ontario vende casi 1.000 millones de dólares en vino, cerveza, licores y seltzers estadounidenses cada año, señaló Ford.
“Canadá no comenzó esta pelea con Estados Unidos, pero es mejor que crean que estamos listos para ganarla”, agregó el gobernador, quien convocó a elecciones para su provincia la semana pasada. Ford dijo que quiere un mandato de cuatro años que supere el término de Trump.
“¿Él quiere venir tras nosotros?”, preguntó. “Aún tengo que escuchar a un ciudadano estadounidense decir que Canadá es el problema”.
Ford también alentó a las empresas a poner la bandera canadiense en los productos para que los canadienses sepan qué comprar.
“Esto es un impuesto a los ciudadanos estadounidenses. Eso es lo que Donald Trump está haciendo a su propia gente”, agregó Ford, quien describió a Musk como parte del equipo de Trump “que quiere destruir los ingresos de las familias, destruir negocios. Quiere quitarle la comida de la mesa a la gente trabajadora y no lo voy a tolerar”.
El domingo, Trump criticó el superávit comercial de Canadá con Estados Unidos y afirmó que sin ese superávit, “Canadá deja de existir como un país viable. ¡Duro pero cierto! Por lo tanto, Canadá debería convertirse en nuestro Querido Estado 51. Impuestos mucho más bajos y una protección militar mucho mejor para el pueblo de Canadá, ¡Y SIN ARANCELES!”.
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Esta historia fue traducida del inglés por un editor de AP con la ayuda de una herramienta de inteligencia artificial generativa.