Antes de responder la pregunta, es importante notar que tenemos muy poca evidencia directa que examina la seguridad y eficacia de la vacuna contra el COVID-19 en personas con enfermedades reumáticas y musculoesqueléticas o enfermedades autoinmunes como la fibromialgia. Así que el Colegio Americano de Reumatología reunió un cuerpo especial de expertos para observar la evidencia científica que está disponible acerca de las vacunas contra el COVID-19, así como lo que se conoce de otras vacunas en pacientes con enfermedades reumatológicas y autoinmunes. Estos expertos desarrollaron una guía para el uso de la vacuna de COVID-19 en pacientes con estos trastornos y para el tiempo de vacunación contra el COVID para las personas que reciben terapias inmunomoduladoras. Por supuesto, si tiene alguna pregunta específica acerca de sus circunstancias, por favor hable con su proveedor/a de cuidado médico.
Así que la siguiente información viene de esta orientación experta.
Primero, para responder una pregunta que quizás no se ha contestado aquí pero es clave para cuando alguien está considerando los riesgos y beneficios de cualquier tratamiento es, ¿cuán importante es recibir el tratamiento en cuestión, en este caso la vacuna contra el COVID?
La vacuna contra el COVID definitivamente se recomienda para pacientes con trastornos reumatológicos y autoinmunes, particularmente porque se considera que estos pacientes tienen mayor riesgo de hospitalizaciones y resultados peores por el COVID en comparación con la población general. Los expertos reconocen que hay variabilidad entre los diferentes trastornos y que hay diferencias en la gravedad de la progresión de las enfermedades reumatológicas y autoinmunes que presentan diferentes niveles de riesgos a individuos cuando se trata del COVID, pero por lo general, los expertos están de acuerdo que como grupo, los individuos con trastornos reumatológicos y autoinmunes tienen un mayor riesgo de enfermedad más severa por el COVID.
Así que, ¿qué sabemos acerca de la eficacia de la respuesta de la vacuna en pacientes con trastornos reumatológicos y autoinmunes? Los expertos están de acuerdo que puede haber una respuesta mitigada a la vacuna en pacientes recibiendo terapias inmunomoduladoras sistémicas y que la respuesta de la vacuna puede durar menos tiempo en comparación a la población general. La razón por esto es porque estas terapias reducen la respuesta inmunológica, como se supone que hagan para ayudar a controlar la enfermedad autoinmune, pero como consecuencia, pueden disminuir la respuesta inmune a la misma vacuna. Hasta qué punto, si es que lo hace, no sabemos. Sin embargo, cualquier protección, tanto completa o parcial, de la vacuna es mejor que ninguna proteccion.
Acerca de la seguridad de la vacuna; no se espera que sea menos segura de lo que es para la población general. Mantén en mente que estas vacunas se supone que provoquen una respuesta de su cuerpo – son vacunas altamente reactogénicas – y tantas personas sienten dolor en el lugar donde recibieron la inyección, dolor de cabeza, dolores musculares, fiebres y escalofríos. Y estos son buenos efectos secundarios – solo señala que la vacuna está trabajando, permitiendo que el cuerpo cree esa respuesta inmune que queremos que nos proteja del COVID en el futuro. Las personas más jóvenes y las personas después de la segunda vacuna tienden a sentir más estos efectos secundarios. También estamos viendo que las personas que han tenido COVID en el pasado están teniendo estas reacciones de efectos secundarios más fuertes después de la primera vacuna. Pero, recuerden que estos efectos secundarios son de esperar, ocurren dentro de 1 – 2 días después de recibir la vacuna, y suele durar un promedio de 1 – 2 días, así que no tenga miedo si los siente.
Ahora, ¿que del posible brote que puede ocurrir después de la vacuna? Hay un riesgo teórico que un brote o empeoramiento de la enfermedad pueda ocurrir después de ser vacunado/a. No tenemos buena evidencia científica apoyando este riesgo, aparte de ser uno teórico. Pero el beneficio de ser vacunado y protegido de contagiarse con el COVID-19 sobrepasa el riesgo teórico de un brote.
Finalmente, por lo general, ningún cambio se tiene que hacer para la mayoría de los medicamentos y terapias inmunomoduladoras que puede estar recibiendo. Sin embargo, el momento de la vacunación en relación con las terapias probablemente tendrá que ser coordinado, así que debe verificar con su proveedor de cuidado de salud para determinar cuándo debe recibir su vacuna en relación con sus tratamientos.
Dr. Marwan Haddad, Community Health Center