Este sujeto de 71 años y residente de Hartford se había desempeñado como CEO de una escuela Chárter, aunque tenía una trayectoria de fraudes desde su juventud.
Gracias a la tecnología de DNA se descubrió que fue él quien secuestró y violó a cuatro mujeres en la década de los 80’ después de invadir su hogares.
Pasados 36 años, fue traído finalmente a la Corte donde un jurado le encontró culpable.
El juez Frank M. D’Addabbo le condenó este pasado lunes a 72 años en prisión con un mínimo de 40. La sentencia no incluyó los delitos de violación de cuatro mujeres de Bloomfield, Windsor, Rocky Hill y Middletown en los meses de verano de junio y julio de1984.
Las victimas identificadas por sus nombres Linda, Shelley, Rosseanne y Kathy declararon en contra de Sharpe frente al jurado que le declaró culpable en noviembre del 2022 por el delito de secuestro porque este sujeto invadió sus hogares y las mantuvo encerradas hasta que satisfizo sus bajos instintos.
El delito de violación debió ser denunciado dentro de un periodo limitado de tiempo y expiró en 1989 sin que la policía pudiera determinar quién era el depravado y por lo tanto estos crímenes no fueron considerados en la sentencia.
El caso se había mantenido como uno sin resolver, pero la policía había guardado prendas, toallas y ropa de cama que al ser examinadas con la nueva tecnología DNA, mostraron que las huellas correspondían a Michael Sharp.
Este dijo frente al juez y a sus víctimas que no recordaba los cuatro episodios y que después de sus declaraciones, le parecieron actos monstruosos.
En uno de los casos, la víctima dormía con su hijita de tres años y aunque le rogó al criminal que no la ultrajara, este así lo hizo.
Una de las peculiaridades del violador era que, durante su estadía en los hogares de las víctimas, las mantenía en la oscuridad y además de ultrajarlas comía y bebía lo que ellas tenían en sus refrigeradores. A una de ellas le dio una propina por colaborar.
Las cuatro damas fueron reconocidas por las autoridades judiciales por ser capaces de testificar en contra de Sharp y revivir los traumáticos momentos que este les hizo vivir.
Todas ellas expresaron que por 36 años las imágenes de lo acontecido en ese verano de la década de los 80,’ volvían a sus memorias y han afectado su salud mental, sus trabajos y en algunos casos sus matrimonios.
Sharpe vino a la Corte acompañado de su hija quien llorando solicitó al juez clemencia por su padre. Sharp pidió perdón a las víctimas, pero la sentencia no varió y deberá permanecer tras las rejas hasta el momento de su muerte.
Policía gritó en exceso a una conductora. Perdió su trabajo
James Hinkle ya no es parte de la uniformada de la ciudad de Waterbury porque violo las pólizas y reglamentos de la policía. Nuevamente un video demostró que el uniformado se excedió cuando estaba a cargo de dirigir el transito manualmente en la intersección de la avenida Thomaston y la calle Homero porque un semáforo se había malogrado.
Todo iba relativamente bien, pero repentinamente un automóvil SUVB atravesó la intersección sin obedecer las señales del policía quien frustrado golpeo con su mano la parte exterior del vehículo y lo persiguió obligándolo a detenerse. Una vez a lado de la ventanilla de la conductora, Hinkle comenzó a gritarle exigiéndole que detuviera el vehículo en el estacionamiento cercano. La chofer, de acuerdo a un video, se excusó repetidamente pidiéndole por favor que no le gritara. El dialogo posterior fue otra serie de gritos criticando a la conductora por guiar y no obedecer su señal de alto en la intersección y casi atropellarlo.
A los gritos del oficial llegaron otros policías a los que el que gritaba les ordeno que chequearan las tablillas y al mismo tiempo interrumpiendo a la dama que trataba de explicar lo ocurrido. Entre gritos desaforados, otro policía le pidió a Hinkle que se calmara.
Lo ocurrido y grabado origino una investigación interna en el departamento de la policía siendo enviado a un puesto administrativo con derecho a paga mientras se investigaba más a fondo el suceso.
Este pasado lunes, James Hinkle fue despedido de su trabajo en el que se había mantenido por siete baños y recientemente se le había asignado a la división de patrullaje.
Trató de esquivar la acción de la policía
Nicholas Gambardella de 27 años buscado por previos actos criminales y a quien la policía le seguía la pista, fue sorprendido por agentes del FBI y del departamento de la policía de East New Haven cuando su vehículo estaba estacionado en un Burger King en Bradford. Los agentes sabían que Gambardella tenía en su posesión un arma de fuego y bloquearon su automóvil para arrestarlo. El felón logro esquivar el cerco chocando a dos coches de la uniformada y escapando por la carretera interestatal numero 95 Sur seguido de cerca por los automóviles policiales. El sujeto tomo la salida 36 a Milford y estrello su vehículo al final de la rampa y huyo a pie. Perseguido por dos uniformados, Gambardella se volvió hacia sus perseguidores quienes le dispararon tres tiros ninguno de los cuales impacto en el fugitivo.
Finalmente fue aprehendido y la policía no encontró el arma de fuego. Posteriormente fue conducido al Hospital de Yale en New Haven para ser tratado por heridas causadas por el choque de su vehículo. Desde allí se le transporto al departamento de la policía de East Haven donde fue procesado por varios actos criminales pendientes.
El sujeto salió en libertad con una fianza asignada de $151,5000 dólares y deberá presentarse en la Corte de New Haven el 18 de enero. Las acusaciones por los delitos del 5 de enero estarán pendientes hasta su próxima vista en los tribunales.
Suspendieron la práctica legal de Norm Pattis
Este abogado criminalista de 65 años que defendió a Alex Jones, un líder de la tenebrosa organización y secta conspirativa QAnon y acusó a los padres de los 20 niñitos masacrados em diciembre de 2012 en la escuelita Sandy Hook de fingir el hecho que según el realmente no ocurrió; recibió la mala noticia de ver suspendida su licencia para litigar y actuar como abogado por al menos seis meses.
La decisión fue tomada por la jueza Barbara Bellis de Connecticut debido a que Pattis compartió con abogados de Texas la información confidencial de los padres que demandaban a Jones por difamación en un juicio en que el veredicto de la justicia de Connecticut ordenó finalmente a este sujeto a pagar $1.4 billón de dólares.
La información privada que Pattis compartió ilegalmente con otros abogados y contenía información médica y siquiátrica, según él fue un acto “inadvertido” de su parte.
La suspensión ha sido un duro golpe para el abogado conocido por su moñito y una bufanda quien no podría ser parte del equipo legal que defiende al insurreccionista Joseph Biggs integrante del grupo terrorista Proud Boys.
Pattis ha dicho en su descargo que existe una actitud prejuiciada en su contra por parte de la jueza Barbara Bellis. Sin embargo, la razón de suspenderle de su práctica es contundente ya que compartió récords privados que incluyen documentación psiquiátrica y médicas de los padres que demandaron a Alex Jones.
Estos documentos suman unas 4,000 páginas de un total de 390,000 que proveyeron los demandantes en el juicio en contra de Alex Jones y que de acuerdo a la jueza Bellis jamás debieron ser dados a conocer públicamente y compartidos entre su oficina legal y otras tres prácticas legales en Texas.
La orden de suspensión del abogado por seis meses tomó lugar el jueves de la semana pasada y se hizo efectiva inmediatamente en las Cortes de Washington que tienen un acuerdo de reciprocidad en casos de abogados acusados de indisciplina afectando la posibilidad de Pattis de ser uno de los defensores de Joseph Biggs.
Abogados de Pattis en Connecticut solicitaron posponer la suspensión y apelar la decisión, lo que fue nuevamente rechazado por la jueza Barbara Bellis.
Pattis es un abogado criminalista graduado de la Universidad de Connecticut con su oficina de práctica legal en New Haven. Tiene además estudios en filosofía del derecho y su nombre se hizo conocido cuando asumió la defensa de Fotis Dulos acusado de asesinar, desmembrar el cuerpo y conspirar para hacer desaparecer el cuerpo de su esposa Jennifer.
Este individuo finalmente se suicidó ya que a pesar de los esfuerzos de Pattis, las evidencias le inculpaban. El abogado dijo, contradiciendo la opinión de expertos, que su cliente no había acabado con su vida por sentirse culpable, sino que por sentirse impotente de mantener su inocencia en una sociedad que no escucha.
El criminalista admitió que en ocasiones su estilo fue agresivo en la defensa de sus clientes al extremo de cruzar el límite del comportamiento exigido de un abogado en los tribunales y correr el riesgo de ser acusado por los jueces de mostrar un actitud de desprecio y menosprecio a las autoridades judiciales.
Los seguidores del integrante de Q’Anon animados por lo que decía Jones a través de la radio y las redes sociales se dedicaron por una década a acosar a los padres de los niños masacrados. Pattis perdió el proceso judicial y su cliente fue condenado a pagar 1.4 billones de dólares por difamación.
Para muchos juristas, la posibilidad de que Pattis cuyo apellido es de origen italiano, encontrara una mina de oro para su práctica legal en la defensa en los tribunales de Washington de los acusados de insurrección miembros de las organizaciones terroristas y de corte ultra racial Proud Boys y Oath Keeper, pudiera ser un serio obstáculo para su carrera.