recientemente, este gobernador del populoso estado de Florida el cual tiene una cantidad aproximada de 21.54 millones habitantes, aprobó una iniciativa de la Junta Estatal de Educación para que en los programas de historia afroamericana de sus escuelas se enseñara que “los esclavos desarrollaron en Estados Unidos habilidades y oficios que en ciertas instancias podrían ser aplicadas a su propio beneficio y progreso.”
La medida provocó un escándalo en los medios de prensa y organizaciones de Florida donde la cantidad de descendientes de afroamericanos alcanza a 14.5 millones.
DeSantis ha dicho que no tuvo nada que ver con la decisión de la Junta Nacional de Educación, sin embargo, sus miembros son designados por él y fue quien hizo aprobar el año pasado una ley para que se prohibieran lecciones de historia en las escuelas que provocaran en los estudiantes “culpabilidad, angustia o cualquier forma emocional de aflicción.”
Una de las respuestas a esta inusual malla curricular de historia en las escuelas de Florida fue la de un editorial del Tampa Bay Times que se inicia con la pregunta, “¿debiera la esclavitud en Estados Unidos ser considerada como una práctica de estudios sin paga?”
Curiosamente de la cantidad de 12,5 millones de esclavos quienes fueron enviados entre 1525 y 1866 como mercancía humana al “nuevo” mundo, fueron comprados en los Estados Unidos la cantidad de 450,000. El mayor infame tráfico humano de la historia se llevó a cabo por embarcaciones portuguesas y españolas hacia el Caribe, Brasil y Sud América en cuya travesía desde Africa no sobrevivieron unos 1.8 millones de personas esclavizadas quien fueron arrojadas al mar.