La vivienda es una necesidad fundamental para el ser humano, ya que proporciona un espacio seguro y estable para vivir, descansar y desarrollarse. Tanto si se compra como si se alquila, una vivienda ofrece protección frente a las inclemencias del tiempo y un entorno propicio para el bienestar físico y mental. Además, una vivienda adecuada facilita la integración social y el acceso a servicios básicos, contribuyendo al desarrollo personal y familiar y a la estabilidad de la comunidad.
El mercado inmobiliario en Estados Unidos ha sido testigo de transformaciones notables en los últimos años, reflejando tendencias económicas y sociales. Con fluctuaciones en los precios, cambios en la demanda y variaciones en las tasas de interés. Además, factores como la pandemia de COVID-19 han influido significativamente en las preferencias de los compradores, impulsando movimientos hacia áreas suburbanas y rurales. Este artículo explora las principales tendencias, desafíos y oportunidades que definen el mercado inmobiliario estadounidense en la actualidad.
La información existente del sector inmobiliario es por demás impresionante y no deja de llamar la atención, y es que en los últimos años el precio y alquileres de las viviendas; así como el incremento de las personas sin hogar se han incrementado sustancialmente. De acuerdo a la Asociación Nacional de Agentes Inmobiliarios; el precio de venta promedio nacional de una vivienda previamente ocupada en el mes de mayo pasado, se incrementó en un 5,8% respecto al mismo mes del año anterior, lo que resulta ser un máximo histórico desde 1999.
La tasa promedio para un préstamo hipotecario a 30 años, ha escalado al 7% por primera vez desde noviembre de 2023 y es más del doble de lo que era a principios de julio de 2021 que se ubicó en apenas el 3%; según la empresa de créditos hipotecarios Freddie Mac. Por eso de cara a las elecciones de noviembre, la reciente evolución del costo de vivienda puede ser un factor que impacta en la intención de voto de los estadounidenses.
Los precios de las casas en la tierra del “Tío Sam”, a partir de la pandemia han aumentado alrededor de un 50%; mientras que los alquileres han subido en una media del 35%, según la firma de servicios inmobiliarios Zillow. Pero en zonas metropolitanas de media docena de los estados más competitivos como son Arizona, Georgia, Michigán, Carolina del Norte, Pensilvania y Winsconsin; el aumento promedio de los alquileres se asemeja mucho a la subida del precio de la vivienda con un 44% entre 2019 – 2024.
En 2024 los precios suben a un ritmo del 7% interanual. Es por eso que nunca fue tan caro comprar una casa en USA como hoy.
El índice que mide la dificultad o facilidad de comprar una casa, se encuentra en mínimos históricos desde 1989, esto implica que el ciudadano se encuentra hoy en el momento más complejo de las últimas décadas a la hora de comprar una casa.
Añadiendo a los datos que se han mencionado, según la Casa Blanca 44 millones de hogares (no individuos), que equivale al 35% de la totalidad de hogares en el país renta una vivienda; quienes en los últimos tres años han tenido que afrontar una escalada de precios sin precedentes. Por su parte el informe America’s Rental Housing 2024 de la Universidad de Harvard reveló que el número de inquilinos que gasta más del 30% de sus ingresos en el pago de la renta alcanza ya los 22,4 millones de hogares (la mitad de esos 44 millones). Y algo que preocupa también es que en el año 2023 (enero); 653 100 personas no tuvieron un hogar. Es la cifra más alta de toda la historia; así como 256 610 estadounidenses se hospedaron en hogares temporales (cifra alta jamás registrada). En los cinco primeros meses de 2024 se han producido 422 000 solicitudes en las 33 ciudades y los 10 Estados en los que trabaja Laboratorio de Desahucios.
Con este panorama, la realidad para millones de familias que buscan comprar una vivienda asequible es adversa. De acuerdo a los cálculos que realizó Bankrate, sobre aquellos que aspiran a adquirir una casa nueva como mínimo deben tener un ingreso anual de U$D 110 841,00; considerando que el costo promedio de una vivienda sea U$D 434 000,00. En California según una muestra obtenida en el pasado mes de junio, el costo medio de una casa es de U$D 858 600,00 y en Miami rentar un apartamento cuesta U$D 4000,00. De la pandemia de la covid-19 en adelante los precios de venta y alquiler de vivienda se han incrementado significativamente, y quienes la llevan más difícil como siempre son los que menos tienen.
En el presente se ha intentado describir precisando la realidad del mercado inmobiliario estadounidense, y sin lugar a dudas es probable que salten preguntas con respecto a la causa o causas. Así que gustosamente se le emplaza querido lector a nuestra siguiente edición en las que serán abordadas.
