
El portero del prostíbulo
No había en aquel pueblo un oficio peor visto y peor pagado que el de portero del prostíbulo… Pero, ¿qué otra cosa podía hacer aquel hombre? De hecho, nunca había aprendido a leer ni a escribir, no tenía ninguna otra actividad ni oficio. En realidad, era su puesto porque su padre había sido el portero