STAMFORD. Americares, con el apoyo de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), está ampliando la educación en salud y telesalud pública, así como los servicios de detección de COVID-19, en El Salvador.
Americares opera el centro de salud para pacientes ambulatorios más grande del este de El Salvador y es el único centro de salud benéfico en la región que continúa brindando servicios de atención primaria durante la pandemia. La Clínica Integral de Atención Familiar en el departamento de Usulután brinda más de 80.000 consultas médicas anualmente y brinda educación en salud y programas de prevención para miles de familias de bajos ingresos en toda la región.
Con el apoyo de la Oficina de Asistencia Humanitaria de USAID, Americares está aumentando las pruebas de detección de COVID-19, las referencias para las pruebas y la administración de casos de COVID-19 y las consultas de telesalud para pacientes con enfermedades no transmisibles y necesidades de salud mental.
Además, está liderando capacitaciones de prevención de infecciones para 10 establecimientos de salud pública en Usulután y La Libertad y contratando trabajadores de salud comunitarios para brindar educación sanitaria e instalar estaciones de lavado de manos para reducir el riesgo de transmisión en las comunidades locales. Se espera que unos 200.000 salvadoreños se beneficien de la ampliación de los servicios de salud y las mejoras de saneamiento para fin de año.
“El Salvador es el país más densamente poblado de Centroamérica y está luchando contra el impacto económico de la pandemia y un sistema de salud con recursos insuficientes”, dijo la Dra. Gabriela Salvador, quien supervisa los programas de salud de Americares en América Latina y el Caribe. “El sistema de salud necesita apoyo para manejar el aumento de pacientes. Este proyecto ampliará la capacidad del sistema de salud para familias de bajos ingresos en toda la región oriental”.
En todo El Salvador, más de 27.000 personas han sido diagnosticadas con el virus y se han registrado más de 800 muertes, según el Centro de Recursos de Coronavirus de la Universidad Johns Hopkins.
Americares ha estado apoyando al sector de la salud en El Salvador desde 1984 asistiendo a una red de hospitales, clínicas y agencias de servicios sociales en todo el país. Americares también opera su clínica de salud más grande en El Salvador. Construida en el 2003 como parte de los programas de recuperación de USAID para del terremoto del 2001, la Clínica Integral de Atención Familiar es un salvavidas para decenas de miles de pacientes de ocho departamentos que dependen de la clínica para servicios de salud de alta calidad y bajo costo. La clínica ofrece servicios de salud integrales, que incluyen medicina interna, pediatría, ginecología, salud mental, radiología, odontología, así como servicios de salud subsidiados para más de 1.500 miembros de la comunidad ultra-pobres anualmente.
Además, Americares tiene un largo historial de respuesta a terremotos, tormentas importantes, deslizamientos de tierra y otras emergencias en todo el país y tiene programación en reducción del riesgo de desastres, gestión de la cadena de suministro y prevención de enfermedades no transmisibles.
Americares está respondiendo a la pandemia de COVID-19 en más de 20 países. A nivel mundial, Americares ha entregado más de 260 toneladas de suministros para el control de infecciones que incluyen máscaras, batas y desinfectantes para combatir la propagación del virus. Y está capacitando a miles de trabajadores de la salud en prevención y control de infecciones, preparación para desastres y salud mental y apoyo psicosocial.
Americares responde a aproximadamente 30 desastres naturales y crisis humanitarias en todo el mundo cada año, establece proyectos de recuperación a largo plazo y lleva programas de preparación para desastres a comunidades vulnerables. Desde su fundación hace más de 40 años, viene proporcionado más de 18 mil millones de dóóares en ayuda a 164 países, incluyendo a los Estados Unidos.