El Fondo Monetario Internacional (FMI) ha revisado a la baja sus proyecciones del crecimiento de la economía de Estados Unidos en el 2024, reflejando un entorno económico más desafiante de lo anticipado. La actualización de las previsiones económicas del FMI se debe a una combinación de factores internos y externos que han afectado negativamente el desempeño económico del país. Entre estos factores se encuentran la persistente inflación, los altos costos de energía, ratio de deuda del país, las tensiones geopolíticas, entre otros. La revisión del FMI subraya la necesidad de medidas estratégicas para mitigar estos desafíos y mantener la estabilidad económica.
El pasado jueves 27 de junio, el organismo en mención quien es la institución central del sistema monetario internacional; relajó levemente el crecimiento de la economía de USA al 2,6%; una décima menor a su estimación anterior. Crecimiento a la baja, pese a que reconoce que es una economía “robusta, dinámica y capaz de adaptarse”. Acotaremos algunos comentarios vertidos en su informe, que nos ayudan a entender las razones de su reciente pronóstico.
Sobre la “política fiscal y monetaria”; que son motores clave del crecimiento económico en todo país. Ya que se hacen uso de ellas, dependiendo del contexto por el que se atraviesa, bien pueden aplicarse políticas expansivas o restrictivas. Estados Unidos por ahora tiene unos tipos de referencia alto (5,25% – 5,50%); que tiene “desesperada” la espera de recortes a gran parte de la población norteamericana; lo cual está frenando y desincentivando el acceso al crédito de las empresas, familias e individuos; aunque reconoce que no ha tenido un impacto fuerte en el mercado laboral, por lo que sugiere que la Reserva Federal (FED) debe esperar hasta fin de año para bajar los tipos. En materia fiscal, recomienda “considerar cuidadosamente” una subida de los impuestos indirectos, progresivamente a de aumentarse los impuestos a la renta, incluso a los hogares que ingresan menos de 400 000 dólares, así como eliminar beneficios fiscales y programas sociales para reducir el déficit.
Afirma en su informe, que la actividad económica y el empleo siguen superando las expectativas, que la reducción de la inflación ha sido menos costosa de lo previsto y espera que se corrija por debajo del 2 % el próximo año. Respecto al desempleo tiene en la “mira” que la tasa sea estable en torno al 4 % hasta el año 2029; teniendo así una economía de casi pleno empleo durante estos años. Además, apunta a que la economía mantenga un crecimiento del PIB de alrededor del 2 % hasta 2029. Sobre esto último no es muy optimista de cara a estos cinco últimos años, si comparamos el crecimiento que se ha tenido después de la recuperación de la pandemia de la covid-19 y antes de ésta.
Resalta algunos riesgos y que en realidad son preocupantes. Por ejemplo, destaca el alto nivel de déficit fiscal (gasta más de lo que recauda) y la relación entre el PIB y la deuda (123,29 % al 2023), lo cual es perjudicial porque “roba” oportunidades de crecimiento. Sobre las restricciones comerciales y los riesgos bancarios, recomiendan al gobierno estadounidense mantenerse en alerta. Explicó Kristalina Georgieva (Gerente del FMI), que si Estados Unidos reduce su déficit, el país tendrá un futuro mucho más sólido.
Georgieva también hizo mención, que el mundo atraviesa un período de incertidumbre geopolítica y, aunque EE. UU. tiene “suficiente espacio para maniobrar su política monetaria” y la inflación “muestra claras señales de volver a un nivel sostenible del 2%”, persisten riesgos. Ha criticado las medidas proteccionistas del país del “Tío Sam” para proteger o desarrollar sectores estratégicos, especialmente frente a China, aunque reconoció las “consecuencias negativas de la globalización”, como la pérdida de empleos y su impacto en los más pobres. No obstante, recordó que la economía estadounidense ha sido tradicionalmente abierta al mundo y se ha beneficiado de bajas restricciones al comercio. Su recomendación ha sido que USA necesita “abordar estos problemas con más diálogo con los socios comerciales, ya que creemos que será menos costoso para Estados Unidos y para la economía global, en lugar de recurrir a aranceles que pueden provocar represalias de otros socios comerciales”.
La autoridad monetaria, en la rueda de prensa ha enfatizado que “cuando la economía es fuerte, es el momento de abordar estas necesidades y revertir la tendencia del déficit”, como también ha recalcado que la única economía del G20, cuyo PIB supera los niveles previos a la crisis sanitaria global de la covid-19 es la de Estados Unidos.
Según el FMI la economía estadounidense crecerá menos de lo que se había previsto anteriormente. Esperamos que las autoridades tomen en consideración lo dicho por el organismo monetario, estén alertas y a la vez hagan uso adecuado de la política monetaria, fiscal y otras políticas públicas; para evitar que ese decrecimiento se profundice y ojalá el crecimiento sea mayor a esta estimación por el bien del país.