Para algunos la tierra era plana y nosotros éramos bestias
Cristóbal Colon estudió en la Universidad de Pavía donde asimiló asignaturas en esos tiempos importantes para la navegación tales como gramática, geografía, geometría, astronomía, navegación y latín. En 1470, el futuro navegante ya conocía lo de las tempranas teorías de que el planeta no era plana, pero tuvo además un aprendizaje importante como agente de negocios con tres familias genovesas muy influyentes.
El dinero y una desmedida ambición fueron importantes en su futuro y de allí su interés en encontrar nuevas rutas para llegar a la llamada las Indias del Este orientadas hacia la hacia China y la llamada Ruta de la Seda.
Logrado el patrocinio de los Reyes Católicos, se dirige hacia el Oeste en el océano Atlántico usando mapas inconclusos. Estos viajes fueron motivados fundamentalmente por motivos estrictamente comerciales, pero debían ser pagados a los inversionistas que financiaban la construcción de carabelas para enfrentar el tenebroso viaje.
Si bien es cierto que al principio la mayoría de los que tripulaban “La Pintas,” “La Niña” y la “Santa María,” eran marinos, en los viajes posteriores, incluso el segundo en que quienes proveían el dinero y esperaban se les pagara en oro, Colón dirigió 17 naves para explorar el así llamado Nuevo Mundo. Las tripulaciones incluyeron más aventureros, desalmados y expresidiarios.
Colón ya en el primer viaje obligó a los Tainos a quienes esclavizó a viajar de regreso a España para mostrarles no como habitantes del nuevo mundo sino como seres que no merecían la calidad de denominarse humanos. Colón juntamente con sus hermanos Bartolomeo y Diego eran aficionados a la tortura de la población nativa y a la violación de las aborígenes.
Víctimas de este tipo de “colonización,” Colón se enteró de la existencia de oro y de inmediato obliga a los aborígenes Tainos a trabajarlas como esclavos. En el transcurso de dos años, 125,000 almas tainas habían perdido la vida por el hambre, enfermedades y explotación laboral.
En crónicas que asemejan a historia de terror en esta época del año, describieron torturas tales como cortar la nariz y sus orejas si es que había sospechas de que un Taino tratara de robar. El “católico” Al mirante también fomentó el comercio sexual vendiendo a jóvenes Taínas como esclavas para la explotación sexual de tunantes y degenerados que componían su nefasta tripulación.
Recientes estudios de crónicas y cartas del “almirante,” le describen como un sujeto con problemas mentales, paranoico, y sospechoso de otros.
El “reinado absoluto” de Colón duraría terribles nueve años hasta que frailes y veedores de los Reyes demostraron su crueldad y ambición desmesurada.
Tradición de Halloween se remonta a 2,200 años A.C.
Los festivales de la etnia celta creían que cuando terminaba el verano y la cosecha y se acercaban los sombríos meses de invierno la línea divisoria entre el mundo de los vivos y el de los muertos se convertía en algo confuso y por lo tanto en lo que ellos llamaban la Noche del año Nuevo -actualmente la noche de Halloween- los fallecidos salían a la superficie y ellos en un festival presidido por los druidas que corresponderían a los actuales samanes, curanderos o sacerdotes; se disfrazaban para a su vez espantar a los muertos.
La tradición católica recoge estas creencias seculares y en el siglo VIII, el papa Gregorio III determina que en el día primero de noviembre se honraría a los muertos. Posteriormente la festividad de comercializa e importada a los Estados Unidos desde Europa se transforma en una actividad comercial donde los estadounidenses comen en una noche un cuarto de todo el dulce que consumen en el año.
Los disfraces constituyen durante Halloween otra fuente comercial pero ya no solamente se refieren a los humanos. Las Cámaras de Comercio USA indicaron en el 2019 que los estadounidenses gastaron 490 millones para disfrazar a su cachorritos.
No se sabe si debido al efecto del azúcar, se están produciendo más actos de vandalismo en los años en la noche de Halloween.
Halloween en el cine
A las antiguas cintas cinematográficas “Drácula,” “Frankenstein,” y “La Momia,” se agregan en 1978, “Halloween” dirigida por Nick Castle, “Halloween Kills” en el 2018, y “Halloween” en el 2021. En la misma vena surgen las películas “Scream,” “Nightmare on Elm Street,” y las ya tradicionales “El Exorcista,” esta última basada en la novela de Stephen King que se convirtió en una popular y ya legendaria cinta dirigida por William Friedkin.