Una fecha fundamental para aprobar el examen de naturalización como ciudadano estadounidense es el 4 de julio de 1776. En esa oportunidad se habría firmado este importante documento, pero la mayoría de los delegados lo harían el 2 de agosto de 1776.
Los Padres Fundadores como se denomina a un comité integrado por Benjamín Franklin, John Adamas, Thomas Jefferson, Roger Sherman y Robert Livingston, delegaron en Jefferson la redacción del borrador.
El comité y el Congreso hicieron en conjunto 86 cambios al bosquejo/borrador inicial y se ordenó que se escribiera en pergamino el 19 de julio, un tipo de papel que solemnizaba la declaración.
Los llamados Padres Fundadores miembros del Comité no esperaban que la fecha fuera recordada el 4 de julio, sino que el 2 de julio cuando el Congreso votó por la independencia del Reino Unido.
Existió más de una copia de la Declaración de la Independencia ya que se imprimieron cientos de ellas gracias a los llamados “Panfletos de Dunlop” en homenaje al propietario de la tienda donde se imprimió. De todos esos impresos sobrevivieron solamente 26 incluidos 2 hallados en los últimos 26 años.
Uno fue hallado en 1989 por un hombre en Filadelfia escondido en un marco de fotos que adquirió en un mercadito por la suma de dos dólares. El otro fue hallado en una caja de papeles del Reino Unido en 2009.
Una de las razones por las cuales sobrevivieron tan pocas copias se atribuye a que estas eran enviadas en sacos expuestos al calor y la humedad. En la actualidad las que aún existen están selladas con un marco de titanio y aluminio expuestas a temperaturas controladas.
Durante la segunda guerra mundial y previendo daños provocados por bombardeos japoneses o alemanes, la copia oficial fue transportada en una equipo de protección de 150 libras y depositada en un lugar secreto en el Fuerte Knox donde permaneció hasta el resto de la guerra.
Otro hecho interesante relacionado con la Declaración de la Independencia fue que Jefferson y Adamas murieron el 4 de julio.
Debate presidencial y curiosidades
Este primer evento organizado por la cadena noticiosa CNN y presentado este pasado jueves 27 de julio a unos 51.3 millones de televidentes fue coordinado de un modo brillante por los periodistas Dana Bash y Jake Tappes.
Para evitar las acostumbradas y pasadas interrupciones de Donald John Trump a su oponente, hubo solamente dos micrófonos, uno para cada participante.
De acuerdo a especialistas que examinaron lo que se dijo, el candidato republicano dio a conocer 30 afirmaciones absolutamente falsas y llamó la atención que el candidato demócrata refiriéndose a éstas las calificara como “malarkey” que en español significan paparruchas, sandeces, majaderías, bobadas y tonterías. Esta palabra es muy utilizada en USA y en Irlanda es un apellido, pero es de origen desconocido.
Información falsa causante de guerras
El gobierno despótico de Vladimir Putin en Rusia informaba que dos tercios de los ciudadanos aprobaba en 2022 la guerra en contra de Ucrania y que esta era una operación necesaria para mantener la paz y liberar a los rusos ucranianos de la presencia de nazis opresores.
La verdad es que Ucrania funcionaba al inicio de la guerra como una democracia con un presidente judío cuyos familiares murieron en el Holocausto. Hasta ahora se calcula la muerte de 100,000 soldados rusos y 100,000 ucranianos, además de miles de civiles.
En 2003 la mayoría de los estadounidenses fueron persuadidos de una alegada posesión de armas de destrucción masiva en Irak lo cual influyó en la decisión de invadir a este país por parte de fuerzas estadounidenses. Sin embargo, el inspector de armas de las Naciones Unidas que investigó la acusación afirmó que no había ninguna. Esta guerra que se extendió entre marzo de 2003 y octubre de 2018 costó la vida a una cantidad que fluctúa entre 268,000 y 295,000 personas incluidos millares de civiles.
Único Médico judío quien sobrevivió persecución en Alemania
En el contexto de la “Solución Final,” declarada por Adolf Hitler con la asesoría de Himmler, la cantidad de 10 millones, cuatrocientos treinta y un mil, quinientos sesenta y nueve judíos en Europa fueron asesinados en Europa en la Europa controlada por los Nazis.
Las víctimas fueron enviadas a campos de concentración, ejecutados a tiros de una manera sumaria, o ahogados por gases, antes y durante la Segunda Gran Guerra Mundial que se desarrolló entre 1939 y 1945. El número de víctimas incluye mujeres, niños, jóvenes, hombres y adultos mayores.
Sin embargo, aun cuando algunos médicos judíos lograron sobrevivir la persecución, hubo uno de ellos que se enfrentó a los esbirros de la Gestapo y al cual Hitler y sus cercanos subalternos permitieron continuar con vida.
La historia comenzó cuando ya antes de la guerra se había fundado el Instituto Kaiser Wilhelm para el Estudios de Células Cancerosas. Todo aquellos médicos e investigadores debían firmar una declaración de provenir de la raza aria por la vía de ambos progenitores, oscuro concepto que en la actualidad y después de investigaciones, no resiste un análisis científico serio.
Sin embargo, hubo alguien que jamás firmó la declaración enviada por la Gestapo y ese fue el director del Instituto llamado Otto Warburg que había recibido el Premio Nobel por sus descubrimientos como bioquímico. La madre del científico no era judía, pero bastaba que uno de los abuelos si lo fuera para no pasar el cedazo del control racial.
En múltiples ocasiones agentes de la Gestapo visitaron al director del Instituto trayendo el formulario de declaración de “raza,” pero este negó a hacerlo despidiendo de un modo rudo a los fatídicos uniformados agentes.
Además de tener ancestro judío, Otto Warburg tenía también una estable y conocida relación homosexual con su chofer lo cual hacia más precaria su supervivencia en una sociedad racista y homofóbica.
¿Que lo libró de la persecución nazi?
La madre de Adolf Hitler quien tenía por ella una marcada adoración había fallecido de cáncer a las mamas produciendo una tremenda devastación emocional en el futuro líder nazi a quien le interesaron los estudios de científicos como Warburg para combatir el alto índice de cáncer que espantaba a Alemania.
Las investigaciones del Instituto en el cual el médico judío era director le permitieron escapar de las indagaciones y acusaciones de la Gestapo protegiéndole casi hasta el final de la guerra de ser enviado a un campo de concentración y la muerte.
Warburg que relacionó el metabolismo humano y la alimentación con el cáncer, mucho antes de que los estudios de DNA descubrieran la variable genética en la aparición de la enfermedad; sobrevivió el periodo de persecución nazi y logró permanecer activo en sus investigaciones hasta los 85 años, falleciendo en julio de 1970 por un coágulo de sangre en una pierna que se extendió por su cuerpo.
Murió convencido que tarde o temprano descubriría los orígenes del cáncer.
Alcohol envenenado en USA
Fue la época en la que los Estados Unidos declara la prohibición en la venta y consumo del alcohol. A mediados de la década de los años veinte y debido a que los ciudadanos conseguían clandestinamente alcohol, autoridades del gobierno decidieron usar formas para contaminar el alcohol usando aditivos que producían mal sabor. Con esto las autoridades esperaban hacer más efectiva la ley que prohibía beber.
Así, nuevos agregados fueron realmente tóxicos para el organismo humano y su mal sabor se compensaba con tragos donde a las bebidas se les agregaban frutas.
La idea de envenenar el alcohol tuvo detractores tales como el senador Edward I. Edwards que llamó a las técnicas de envenenamiento un “crimen legalizado.” Sin embargo, Seymour M. Lowman, Asistente al secretario del tesoro a cargo de la Prohibición declaró que, si el envenenamiento ayudaba a crear una América sin bebedores de alcohol, el trabajo era objeto de admiración.
De este modo unas 10,000 personas murieron debido a la fatídica técnica del alcohol modificado.
Intento de golpe de estado en Bolivia
Así lo informo al mundo el presidente boliviano Luis Arce quien dio a conocer el ataque al Palacio Quemada y la aprehensión de Juan José Zúñiga, líder de las fuerzas atacantes
Desde 1946, Bolivia ha sufrido 38 golpes de estado, un récord en Sudamérica.