NORWALK.- Llevados por el pedido de Shelly Yong, del Departamento de “Literacy Volunters” de la Biblioteca Pública, la conocida pareja de activistas comunitarios, Soledad y Atilio Albitres, peruanos, convocaron a los líderes de la comunidad y lograron poner en el escenario el talento artístico de varios países de América Latina, con el fin de celebrar el “Mes de la Herencia Hispana”.
El maestro de ceremonias, José Ríos-Niño y su esposa Cecilia, se vistieron con trajes de su tierra natal, el Perú, al igual que todos los líderes comunitarios que participaron en la organización del evento. Jesús Antonio Bravo, presidente de la Asociación Colombo-Hispanoamericana (ACHACT), se puso al hombro una alforja con granos de café, en señal de que es colombiano. Atilio Albitres un chaleco de lentejuelas como parte del vestuario del baile de “huailas peruanas” y su esposa Soledad, de los pies a la cabeza se atavió el traje costumbrista de la serranía de Huancayo, que le dio el pase, para luego, bailar el tradicional huayno peruano.
“No te vayas a ir sin verme bailar y recuerda que “La Marketa” te brinda refrescos y galletas”, dijo Soledad, a Maricarmen Godoy, periodista de La Voz Hispana de CT, encargada de cubrir la historia. En eso, Shelly Yong, del programa de “Literacy Volunters” contó que estuvo en su mente realizar una jornada para celebrar el orgullo hispano, y apenas contó a Soledad ella le respondió: “¡Claro! ¡lo hacemos!, ya le voy a pedir a mi esposo (Atilio) que nos apoye”.
Y, efectivamente, Atilio Albitres se encargó de convocar a todos los líderes hispanos de Norwalk y Stamford, y juntos lograron montar una jornada vespertina de más de dos horas de música, danzas y poesía, a la que acudió el alcalde Harry Rilling, su esposa Lucía, que es de ascendencia ecuatoriana y el subjefe de Policía, Joe Dinho, su esposa, la cantante colombiana Jei Santander; varios policías hispanos y un público que abarrotó el segundo piso de SoNo Library en el sur de Norwalk.
Para la producción de la celebración, los organizadores colocaron en la pantalla gigante un video de los países participantes mientras los artistas cantaban, bailaban o tocaban un instrumento. En la pantalla se podía observar paisajes y estampas costumbristas de nuestros países latinoamericanos.
La presencia del grupo de proyección folklórica Puricugna de Ecuador, tuvo una aceptación especial porque bailaron con trajes coloridos de la región norteña del Ecuador y dedicaron la danza en ritmo de “sanjuanito” a la Primera Dama, su compatriota, Lucía Rilling.
También la presencia de Soledad Albitres Wilfredo Arbieto y Marlube Huamanní, que bailaron el huayno “Pío, pío, trajo aplausos y algarabía por la carga emotiva en su zapateado y la pomposidad y colorido de sus trajes. Además, porque antes de bailar, Soledad, que tiene un gran sentido del humor dijo: “baila el pio, pio, y ahí sientes el orgullo de ser hispano…”
El baile de la marinera norteña, el género nacional del Perú, interpretado por “Children Dance Group” también trajo aplausos por la elegancia de los trajes y los movimientos y por la corta edad de la pareja de bailarines; igualmente, el canto de Lucero Carreño Trejo que al son de la guitarra, conmovió a la audiencia al interpretar el “Cóndor Pasa”, el himno popular peruano en el mundo. Y por Argentina, Anahí Rossini, declamó un poema de su autoría.
Lo propio hizo, Jei Santander, al representar Colombia; Carlos Fallaque al cantar por Perú y Angélica Aguilar en representación de México, que apoyados con pistas musicales cantaron canciones emblemáticas de sus países. Los aplausos también se llevó Alfonso Barrientos que con su violín tocó al ritmo de “Carnaval peruano”, lo que le valió que el público se levantara a bailar.
Sin duda alguna, el cierre con broche de oro se llevó el grupo: ASOVEN, Ritmo y Folklore venezolano; liderado por Clodomiro Falcón y Deiker Torrealba, el primero, un músico completo con afinación exacta que toca arpa llanera y cuatro venezolana, y Deiker que es contrabajista y que perteneció a la Filarmónica de Caracas y de Bogotá y que hoy funge como Conductor Invitado de la Orquesta Sinfónica Juvenil de Norwalk y es maestro titular de Intempo, la galardonada organización musical de Stamford con el premio de la Casa Blanca.
Asoven, puso en escena la canción más importante de su país, el Alma Llanera y los mundialmente conocidos temas: Caballo Viejo y El Gavilán.