STAMFORD.- Leonard C Boyle, Fiscal Federal del Distrito de Connecticut, y William S. Walker, Agente Especial Interino a Cargo, Investigaciones de Seguridad Nacional (HSI), Boston, anunciaron que Luciano Solís Sánchez, de 36 años, ciudadano de México que residió por última vez en Waterbury, se declaró culpable en la corte federal de Hartford de delitos de inmigración y sustancias controladas.
Según documentos judiciales y declaraciones hechas en la corte, Solís-Sánchez nunca ha tenido estatus legal en los Estados Unidos. En abril del 2007, Solís-Sánchez fue encontrado por la Patrulla Fronteriza de los Estados Unidos (USBP) en Arizona y se le concedió el regreso voluntario a México. En noviembre del 2017, USBP lo encontró nuevamente y fue trasladado a México.
Aproximadamente una semana después de su expulsión, USBP volvió a encontrar a Solís-Sánchez en Arizona mientras intentaba ingresar ilegalmente a los Estados Unidos. Fue acusado y condenado por entrada ilegal y nuevamente trasladado a México.
En dos ocasiones en mayo de 2019, Solís-Sánchez fue encontrado por USBP en Texas y fue trasladado a México.
El 3 de marzo de 2020, Solís-Sánchez fue arrestado por la policía de Waterbury por cargos de posesión de narcóticos con la intención de vender, posesión de drogas cerca de un lugar prohibido, operar un vehículo motorizado en sentido contrario y sin licencia de conducir. Fue puesto en libertad por el estado con la promesa de comparecer. Posteriormente, las autoridades federales se enteraron del arresto y obtuvieron una orden de captura contra Solís-Sánchez acusándolo de reingreso ilegal.
El 8 de enero del 2021, la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza, inspeccionó un paquete de UPS que se originó en Zapopan, México, y estaba dirigido a “Alfonso Pérez, de 39 años de edad, residente de Bucks Hill Rd, Waterbury, CT 06704, que era la residencia de Solís-Sánchez.
El paquete contenía una lámpara hecha a mano que tenía dos paquetes que contenían aproximadamente 498 gramos de metanfetamina escondidos detrás de un panel de fibra de vidrio.
El 13 de enero del 2021, la policía realizó una entrega controlada del paquete en 39 Bucks Hill Road y luego ejecutó una orden de registro en la residencia. La búsqueda reveló una cantidad de distribución de cocaína. Solís-Sánchez fue arrestado poco tiempo después.
En el momento de su arresto, poseía una cantidad adicional de cocaína que tenía la intención de vender. Solís Sánchez admitió que organizó la entrega del paquete que contenía metanfetamina y también recibió envíos de cocaína del mismo proveedor.
Solís Sánchez se declaró culpable de un cargo de reingreso de un extranjero expulsado, que conlleva una pena máxima de prisión de dos años, y un cargo de posesión con intención de distribuir metanfetamina y cocaína, que conlleva una pena máxima de prisión de 40 años. Está programado que sea sentenciado por la jueza de distrito de los Estados Unidos, Vanessa L.Bryant, el 13 de octubre de 2021 y está detenido desde el 13 de enero de 2021.
Esta investigación está siendo realizada por Investigaciones de Seguridad Nacional, Operaciones de Ejecución y Remoción de Inmigración y Control de Aduanas, y la Policía Estatal de Connecticut, Grupo de Trabajo Estatal de Narcóticos, Noroeste. El caso está siendo procesado por los fiscales federales adjuntos Angel M. Krull y Deborah R. Slater.