BEERSHEBA, Israel (AP) — El ministro de Defensa israelí amenazó al líder supremo de Irán el jueves después de que misiles iraníes impactaran en un importante hospital en el sur de Israel y alcanzaran edificios residenciales cerca de Tel Aviv, hiriendo al menos a 240 personas. Mientras los rescatistas evacuaban a los pacientes del hospital humeante, aviones de combate israelíes lanzaron otro ataque contra el programa nuclear iraní.
El ministro de Defensa israelí, Israel Katz, culpó al líder supremo de Irán, el ayatolá Alí Jamenei, por el bombardeo del jueves y dijo que el ejército “ha recibido órdenes y sabe que, para lograr todos sus objetivos, este hombre absolutamente no debe continuar existiendo”.
En Washington, la Casa Blanca anunció que el presidente Donald Trump decidirá si se une a la campaña de Israel contra el programa militar y nuclear de Irán dentro de dos semanas, diciendo que Trump aún ve una ventana para la diplomacia para abordar las demandas de Israel y Estados Unidos sobre el programa nuclear de Irán.
“Basado en el hecho de que hay una posibilidad sustancial de negociaciones que pueden o no tener lugar con Irán en el futuro cercano, tomaré mi decisión de avanzar con esos planes o no dentro de las próximas dos semanas”, dijo la secretaria de prensa Karoline Leavitt a los periodistas, citando a Trump.
El primer ministro Benjamin Netanyahu declaró que confiaba en que Trump “hará lo mejor para Estados Unidos”.
“Puedo decirles que ya están ayudando mucho”, indicó Netanyahu en medio de escombros y vidrios rotos alrededor del Centro Médico Soroka en la ciudad sureña de Beersheba, en Israel.
Autoridades estadounidenses señalaron esta semana que Trump había vetado un plan israelí para asesinar a Jamenei. Trump sostuvo más tarde que no había planes para matarlo “al menos por ahora”.
Estados Unidos ha estado considerando si unirse al ataque de Israel atacando la instalación de enriquecimiento de uranio Fordo en Irán, que está enterrada bajo una montaña y se considera ampliamente fuera del alcance de todos,excepto de las bombas “rompe-búnkeres” de Estados Unidos.
El conflicto el viernes pasado con una oleada sorpresa de ataques aéreos israelíes contra sitios militares, generales y científicos nucleares. Al menos 639 personas, incluidos 263 civiles, han muerto en Irán y más de 1.300 han resultado heridas, según un grupo de derechos humanos iraní con sede en Washington.
Irán ha lanzado más de 400 misiles y cientos de drones, matando al menos a 24 personas en Israel e hiriendo a cientos más.
Más de 200 heridos, incluidos decenas en el ataque al hospital
Al menos 240 personas resultaron heridas en el último ataque iraní a Israel, incluidos 80 pacientes y trabajadores médicos heridos en el ataque al Centro Médico Soroka. La gran mayoría sufrió heridas leves, ya que gran parte del edificio del hospital había sido evacuado en los últimos días.
El Comando del Frente Interno de Israel expresó que uno de los misiles balísticos iraníes disparados el jueves por la mañana había sido equipado con municiones de racimo fragmentadas. En lugar de una ojiva convencional, tal misil lleva docenas de submuniciones que pueden explotar al impactar, esparciendo pequeñas bombas en un área amplia y representando grandes riesgos en el suelo.
El ejército israelí no reveló dónde se había disparado el misil con la ojiva de munición de racimo.
Funcionarios iraníes insistieron en que no habían buscado atacar el hospital y afirmaron que el ataque golpeó una instalación perteneciente a la unidad tecnológica de élite del ejército israelí, llamada C4i . El sitio web del parque de tecnologías avanzadas Gav-Yam Negev, a unos tres kilómetros (2 millas) del hospital , declaró que C4i tiene un campus en la zona.
El ejército israelí no respondió a una solicitud de comentarios. Un funcionario militar israelí, que habló bajo condición de anonimato de acuerdo con las regulaciones, reconoció que no había inteligencia específica de que Irán hubiera planeado atacar el hospital.
Muchos hospitales en Israel, incluido Soroka, habían activado planes de emergencia la semana pasada, convirtiendo estacionamientos subterráneos en salas y trasladando a pacientes vulnerables a áreas de sótano.
Israel también cuenta con un banco de sangre fortificado y subterráneo que se activó después del ataque de Hamás del 7 de octubre de 2023, que desencadenó la guerra en curso en la Franja de Gaza.
Médicos del Centro Médico Soroka contaron que el misil impactó casi inmediatamente después de que sonaran las sirenas antiaéreas, causando una fuerte explosión que se pudo escuchar desde una sala segura. El ataque infligió el mayor daño en un antiguo edificio de cirugía y afectó infraestructuras clave, incluidos los sistemas de gas, agua y aire acondicionado, indicó el centro médico.
El hospital, que presta servicios a aproximadamente un millón de residentes del sur de Israel, estaba atendiendo a 700 pacientes. De los 80 heridos leves, la mitad eran personal del hospital, indicó la institución. Después, el hospital fue cerrado a todos los pacientes, excepto para urgencias extremas.
Irán ha lanzado cientos de misiles y drones contra Israel, aunque la mayoría han sido derribados por las defensas antiaéreas israelíes.
Irán rechaza las llamadas a rendirse o abandonar su programa nuclear
Irán ha mantenido durante mucho tiempo que su programa tiene fines pacíficos. Sin embargo, además de tener una planta de energía nuclear, también enriquece uranio hasta un 60%, a un breve paso de los niveles de grado armamentístico del 90%. Es el único estado no nuclear que enriquece a ese nivel.
Israel es el único estado con armas nucleares en Oriente Medio, aunque no reconoce tenerlas.
El líder supremo de Irán rechazó el miércoles los llamados de Estados Unidos a rendirse y advirtió que cualquier participación militar de los estadounidenses causaría “daños irreparables para ellos”.
Hasta ahora, la campaña de Israel ha tenido como objetivo el sitio de enriquecimiento de Irán en Natanz, talleres de centrifugadoras alrededor de Teherán y un sitio nuclear en Isfahan.
El jueves, la artillería antiaérea era claramente audible en todo Teherán y testigos en la ciudad central de Isfahan informaron de fuego antiaéreo después del anochecer.
Un funcionario militar israelí, que habló bajo condición de anonimato de acuerdo con las regulaciones, manifestó que los ataques aéreos han destruido alrededor de dos tercios de los lanzadores de misiles balísticos de Irán, dejando poco más de 100 lanzadores operativos. Las pérdidas han contribuido al declive constante de los ataques iraníes desde el inicio del conflicto, evalúa el ejército.
El ministro iraní de Exteriores, Abbas Araghchi, anunció que viajará a Ginebra para reunirse con sus homólogos de Reino Unido, Francia y Alemania, así como con la principal diplomática de la Unión Europea, indicando que podría estar tomando forma una nueva iniciativa diplomática.
Irán acordó rediseñar Arak para abordar preocupaciones nucleares
El ejército israelí dijo el jueves que sus aviones de combate atacaron el reactor de agua pesada de Arak, a unos 250 kilómetros (155 millas) al suroeste de Teherán, para evitar que se utilice para producir plutonio.
La televisión estatal iraní indicó que “no hay peligro de radiación en absoluto” alrededor del sitio de Arak, que dijo había sido evacuado antes del ataque.
El agua pesada ayuda a enfriar los reactores nucleares, pero produce plutonio como subproducto que puede ser utilizado en armas nucleares. Eso proporcionaría a Irán otro camino hacia la bomba más allá del uranio enriquecido, si decidiera desarrollar el arma.
Irán había acordado bajo su acuerdo nuclear de 2015 con las potencias mundiales rediseñar la instalación para aliviar las preocupaciones de proliferación. Ese trabajo nunca se completó.
El reactor se convirtió en una fuente de discrepancias después de que Trump se retirara del acuerdo nuclear en 2018. Ali Akbar Salehi, un alto funcionario nuclear de Irán, dijo en 2019 que Teherán compró piezas adicionales para reemplazar una parte del reactor en la que había vertido concreto para inutilizarla según los términos del acuerdo.
Israel aseguró que los ataques se llevaron a cabo “para evitar que el reactor sea restaurado y utilizado para el desarrollo de armas nucleares”.
El Organismo Internacional de Energía Atómica, el organismo de control nuclear de Naciones Unidas, ha instado a Israel a no atacar las instalaciones nucleares iraníes. Según reportes, los inspectores del OIEA visitaron Arak por última vez el 14 de mayo.
Debido a las restricciones que Irán impuso a los inspectores, el OIEA ha dicho que perdió la “continuidad del conocimiento” sobre la producción de agua pesada de Irán, lo que significa que no pudo verificar absolutamente la producción y el stock de Teherán.
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Melzer reportó desde Tel Aviv, Israel y Gambrell desde Dubái, Emiratos Árabes Unidos. La corresponsal Melanie Lidman en Tel Aviv contribuyó.
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Esta historia fue traducida del inglés por un editor de AP con la ayuda de una herramienta de inteligencia artificial generativa.