El matrimonio de Carlos y Berta Quiñonez visitaban a menudo a sus hijos y nietos que viven en Wallingford, pero accidentes recientes y sus propias experiencias le han obligado a disminuir estos encuentros, incluso una reunión familiar del pasado cuatro de julio.
Las razones no tienen que ver con problemas de la vista ni incapacidades y ambos cuentan con sus licencias para conducir, pero he aquí lo que relatan.
“Usamos las rutas interestatales con frecuencia, pero lo que sucede ahora nos ha obligado a evitar viajes en horas de la noche, e incluso los viernes, sábados o domingos. Aunque las autoridades han dicho que es positivo que el flujo de tránsito haya superado el periodo de la pandemia, estos no es una buena noticia para nosotros. Observamos el día en que una enorme bandera de Estados Unidos fue sido izada en la carretera debido a la muerte del guardia estatal Aaron Pelletier arrollado por un individuo que guiaba intoxicado y semi consciente por haber ingerido alcohol y drogas,” dijeron.
Este pasado martes Melissa Lombardi, tía de un empleado de DOT arrollado en la carretera, hizo uso de la palabra en una conferencia de prensa realizada en Wallingford en un sector de la carretera interestatal 91 sur a la que asistieron el gobernador Ned Lamont, el Comisionado de Transporte Garrett Eucalito y varios miembros de la familia de Andrew Di Doménico quien muriera el pasado 28 de junio atropellado por un vehículo en la rampa de la salida 13 mientras llevaba a cabo su trabajo.
“La gente está conduciendo sus vehículos de un modo irracional,” dijo Melissa Lombardi, la tía de la víctima, agregando que se mismo día yendo al lugar de la conferencia estuvo a punto de ser chocada en dos oportunidades. “Quienes usan las vías de transporte no tienen ningún respeto por otros, desconocen las reglan del transito y los fines de semanas van en muchos casos intoxicados después de beber en exceso,” dijo emocionada por la pérdida de su sobrino de 26 años que vivía en Meriden y recibió el sorpresivo impacto por una persona embriagada a las 9:15 de la mañana.
Denise Lucibello de 55 años fue arrestada, compareció en la Corte el pasado lunes y se le asignó una fianza de $500,000 dólares. Llama la atención la hora del accidente y como hay personas que se embriagan temprano en el día y guían sus coches.
La triste y acongojada tía exige a las autoridades que se aumente las penalidades para aquellos que parecen desconocer u olvidar las reglas del tránsito.
Joseph Marín, un ingeniero jubilado de la Dirección de Transporte Público dijo que este situación se está tornando critica, especialmente en días feriados como las del pasado 4 de julio 2024 cuando se calculaba que unos 70.9 millones de personas viajaban en Estados Unidos entre los días 29 de junio y 7 de julio en vehículos por lo menos 50 millas.
“Estos feriados son malas noticias porque muchas personas sufren accidentes por guiar intoxicadas, o por haber sido chocadas por conductores irresponsables,” dijo.
Se han mencionado algunas razones por las que han aumentado los accidentes, aunque los medios de comunicación informan y alertan acerca del flujo del tránsito, accidentes, desviaciones y las condiciones del tiempo.
Una de ellas, sino la principal es que hay muchos elementos tecnológicos que distraen en el interior del vehículo del conductor a quien entretiene el celular donde conduciendo recibe y hace llamadas, manipulando los cambios de estación radial para escuchar música, o sostienen conversaciones con sus pasajeros apartando la mirada de la carretera. Aunque los guardias estatales sorprenden a los infractores es tarea imposible acabar con hábitos perniciosos de entretenimiento.
También se ha notado en las carreteras y ciudades que los conductores ya no señalizan ni aminoran la velocidad cuando van a pasar a otro vehículo. En mucho de los casos simplemente hacen lo que se denomina en la jerga popular cortes de pastelillos cruzándose frente al otro coche a una peligrosa distancia.
También son frecuentes la disminución de velocidad sorpresiva cuando el conductor se encuentra con un tapón de tráfico a la entrada de ciudades como es el tenebroso caso de las carreteras 91 norte y sur y las interestatales 84 este y oeste en las proximidades de la ciudad capital.
Ahora bien, si bien es cierto el aumento de vehículos comerciales significa una activación de la economía, camiones de alto tonelaje además de afectar el estado de las carreteras son un peligro debido a que en ocasiones por exceso de peso explotan sus neumáticos.
Los choferes de estos inmensos medios de transporte han guiado a veces más de diez horas y a eso se deben camiones volcados porque el conductor va agotado y pierde el control de su máquina.
Raül Beltrán trabajó muchas horas y su camión se volcó sobre dos vehículos pequeños aplastando a sus conductores. El sobrevivió, pero quedo inválido de una pierna.
El factor viento puede también provocar la estabilidad de vehículos que reciben el impacto de violentas ráfagas de aire durante las recientes tormentas.
Raül recuerda que en el pasado los vehículos pesados debían pesarse para vigilar el peso de la carga, pero esta práctica fue criticada por los grandes empresarios que también han reclamado cuando las autoridades estatales han anunciado la posibilidad de cobrar impuestos para quienes usen carreteras con vehículos pesados.
Para los familiares de la víctimas como Andrew DiDomenico de DOT y la esposa y familiares del guardia estatal Aaron Pelletier de atropellos debido a choferes embriagados, hay una mancha de desazón, impotencia y vulnerabilidad y también para los cientos de miles de choferes que aunque guían de un modo correcto de acuerdo a los reglamentos de la Dirección de Motores y Vehículos, deben conducir a la defensiva para evitar impactos provocados por choferes irresponsables, delincuentes que huyen en sus automóviles de la policía, motociclistas, individuos que manejan sus carros borrachos o que usan marihuana y otras drogas, y los grandes móviles de transporte de carga.