DANBURY.- Con una carta fechada y notarizada el 28 de febrero del 2022, el Obispo de la Diócesis de Bridgeport, Frank J. Caggiano, firmó el nombramiento bajo la norma canónica 476-481, en la que, a partir del primero de marzo de este año, el Padre John Pérez, superior de la parroquia Nuestra Señora de Guadalupe de Danbury, asume el puesto de “Vicario Episcopal para Hispanos Católicos” de la Diócesis.
En la homilía dominical de las dos de la tarde del pasado domingo, el padre John Pérez, nativo de Bello-Antioquia, Colombia; ordenado sacerdote por la Diócesis de Bridgeport, anunció a sus fieles el nombramiento hecho por el Obispo Caggiano y aunque dijo que lo recibía con humildad, señaló que espera el apoyo de todos porque eso implicará que estará menos tiempo en la parroquia, porque estará atendiendo la vicaría que aglutina a doce parroquias hispanas que conforman el condado de Fairfield, a dieciséis sacerdotes hispanos y a cinco sacerdotes anglos que hablan español y que mantienen ministerios hispanos en sus parroquias.
“El Obispo me ha nombrado en un nuevo cargo, esto quiere decir, que me ha dado más trabajo, ¿pero?, yo seguiré aquí en la parroquia como siempre, aunque con menos tiempo. Me ha encargado y nombrado nuevo Vicario, eso quiere decir, que debo cubrir todos los asuntos hispanos del Condado de Fairfield”, dijo. Lo que le valió el aplauso de sus feligreses en plena misa.
Pero para llegar al Padre John la Diócesis debió a través del Vicario General, hacerle una llamada telefónica y proponerle la posición tres semanas antes del nombramiento. Tiempo que el sacerdote se tomó para pensar si es que era adecuado aceptar la posición considerando que su parroquia demanda de atención a tiempo completo.
Pero, gracias al apoyo de su párroco asociado el P. Pedro Sosa y el diacono Rafael Regús y la llamada de otro sacerdote que -hasta este momento- está en conversaciones para mudarse a su parroquia para ayudarlo, el P. Pérez decidió aceptar la petición del Obispo.
“Al Obispo Caggiano siempre le he dicho: ¡Cuente conmigo para lo que necesite! y estas palabras deben convertirse en hechos. Además, hice un voto de obediencia y lo debo cumplir”, respondió.
El nombramiento de Vicario Episcopal del Ministerio Hispano tomó vigencia el primero de marzo y desde ese momento empezó a contactarse con sus compañeros sacerdotes y diáconos de origen hispano o que hablen español a los que él los llama “hermanos”, para ponerse a sus órdenes y para saber cómo están trabajando el tema de la evangelización dentro de sus parroquias, que es la razón del Vicariato.
Evangelización que conlleva la catequesis infantil, los movimientos de líderes hispanos, los cursillos de formación prematrimonial, los retiros espirituales. Todo esto llevado en español.
En la mira del Padre Pérez está reestablecer el programa “el Viñedo de Raquel” que era concebido para dar apoyo a las mujeres que lidian con el aborto, replantear los cursillos pre-matrimoniales para que dejen de ser virtuales y pasen a ser presenciales. Además, asegurarse que el curso “Virtuos”, dirigido a los voluntarios parroquiales, se siga manteniendo vigente para reforzar el conocimiento sobre cómo debe ser el trato con los menores de edad y evitar el acoso sexual dentro de la iglesia. Curso que se dicta desde el 2001.
Y asegurarse que todos los cursos y guías que se dan en cada parroquia sean traducidos al español, considerando que la población católica del Condado es del 25 por ciento, y hay iglesias que tienen una feligresia del cien por ciento hispana como es su parroquia, Nuestra Señora de Guadalupe en Danbury. O el caso de Shelton que, aunque en este momento no tiene un sacerdote hispano, sino un párroco que habla español perfecto tiene un alto porcentaje de fieles hispanos y está creciendo cuantitativa y cualitativamente su población hispana. Además, las cuatro iglesias con ministerio hispano en Greenwich.
Otro tema que es de interés del nuevo Vicario es seguir perservando el Ministerio de la Música en español, para eso quiere asegurarse que las parroquias tengan sus coros con los instrumentos nativos de cada región y que sigan apegados los cantos en español a la liturgia. “Los hispanos vemos en la música una expresión y eso lo vuelve una costumbre eclesiástica y por eso necesitamos de las voces nativas; en cambio, la iglesia anglosajona ve a la música como parte de la liturgia, de la alabanza, de la belleza y por eso siempre hay el órgano tubular en sus misas”, repuso el sacerdote, para entender porqué es necesario seguir reforzando la música vernácula como parte de la evangelización.
El Padre John Pérez, es nativo de Colombia, llegó a la Diócesis de Bridgeport en 1999 gracias al director de Vocaciones de la Diócesis que le pidió al Cardenal Eagan por su traslado, Fue ordenado sacerdote en esta Diócesis después de terminar sus estudios universitarios, ser seminarista y batallar día con día con el inglés.
Su primera parroquia fue la iglesia Saint Mary en Stamford, luego Saint Peter en Danbury, luego regresó a Saint Mary y en este momento se encuentra ya ocho años como superior en Nuestra Señora de Guadalupe.