Titi Julia,
Para comenzar por el principio como cuando existía el verbo, queremos desearle con mi esposo Bartolo y nuestra familia extendida una Feliz Navidad y un próspero 2025, aunque las amenazas financieras del que será el presidente el lunes 20 de enero y que mal rayo parta, fastidian las fiestas desde ahora hasta el Día de Reyes. Según mi esposo los únicos felices son los billonarios y lame ojos que asesoran a este tipo en la Casa Blanca a la que ahora quiere pintar roja Maga, construir allí un campo de golf y un casino.
Resulta tía que cada año, la presencia de mi cuñado Félix y su esposa afectan la dinámica de regocijo. Desde noviembre andan con la cantaleta que pregona el hermano Chuito de que para navidades habrá una nevada de madre que alcanzara varios pies de altura, además de problemas de masas de hielo que harán difícil el acceso a los hogares. Nos ha recomendado juntar alimentos no perecibles y postergar la fiesta hasta la próxima primavera.
Lo mismo sucedía con las parrandas en Puerto Rico cuando exigía que avisáramos de las visitas llamadas “asaltos” que como su nombre lo indica, son el arribo sorpresivo de un grupo de cantantes y músicos entonando la hermosa canción “Saludos, Saludos,” y “El jolgorio está.”
Según Félix, estos actos entorpecían el sueño de los visitados y violaban la privacidad de las familias. Curiosamente este individuo llegaba a estos eventos con la de una cara de persona derrotada en las elecciones, pero que comía de un modo exagerado el lechón y el arroz con gandules, pero que con su esposa no aportaban con nada.
Ya en los hogares y como es tan desafinado le daba por contar unos chistes flojos como el de un hombre que vivía en Connecticut que era bombero voluntario y al que su hijo caracterizaba como muy valiente porque cuando sonaba la alarma, aunque fuesen las tres de la mañana, saltaba de la cama, se vestía, se ponía la cotona y el casco y salía a apagar incendios. Pero el niño decía que su tío que vivía en la casa y era hermano del bombero era muy cobarde, porque apenas se iba su papá, el tío se metía en la cama de su mai y se ponía a tiritar de miedo.
Otro que me pareció absolutamente flojo era el de un gatito que esperaba la salida de un ratoncito de un agujero en la pared para asesinarlo y al que le maullaba “meaw, meaw.” El papá gato se acercó a él y le dijo. “Así no lograrás nada minino, imita el ladrido de un perro y veras el resultado. De este modo el gatito en vez de maullar, grito “guau-guau” y cuando el ratoncito se asomó lo pudo cazar. Su padre orgullosísimo le dijo al gatito. “Esto te demuestra hijo mío la importancia de ser bilingüe.”
Tía, le he dicho a mi esposo que no invite nunca más a Félix ni a su esposa porque ya después de once años me molesta que sean tan papeadores y que él cuente esas historias a las que él llama “chistes de salón,” pero que dan ganas de llorar por lo flojos.
¿Cree usted que debiera conformarme con la presencia de Félix para complacer a mi esposo o simplemente no avisarle de los festejos? Saludos a su familia y le deseamos lo mejor para el año que se avecina. Por favor, a partir del 20 de enero, lleve siempre en su cartera la licencia de conducir y el certificado de nacimiento, además de su licencia de periodista por esto de las deportaciones.
Marcia del Hoyo y Cuebas
Respuesta
Querida sobrina Marcia del Hoyo y Cuebas,
Tienes apellidos muy importantes, aunque la gente se pueda reír contando el chiste del toro maura a quien bautizaron en España como Melhollo y la gente le gritaba ¡Ole mel…!
En general, hay muchas personas que no están con el ánimo de contar chistes, o celebrar fiestas ahora ni para el Día de Reyes por la razón que tu mencionas y en eso les doy la razón. En cuanto a los asaltos tan típicos en Puerto Rico y en nuestra comunidades en Connecticut y Massachusetts, hay que tener cuidado de no alarmar a las familias porque pueden creer que son visitas de inmigración.
Asistimos con una sobrina a un evento que denunciaba el plan 2025 de los billonarios de Washington y además de revelar los futuros atropellos a los derechos humanos y a la persecución de inmigrantes calvos sin documentos, dijeron que la comunicación en la familia, la reunión con amistades en la que cada una aporte con algo, las llamadas telefónicas, y el contacto por las redes con grupos sanos; ayudan en momentos en que no se conoce a ciencia cierta qué hará el presidente electo que paga las donaciones de millonarios para su pasada campaña con posiciones en el gobierno.
Hay que hacer cenas con habichuelas, morcillas, chorizos, rellenos de carne, ensaladas, y productos Goya, antes de que el ministro Kennedy que amenaza con suspender el uso de vacunas, declare ciertos alimentos como insalubres y los saque del mercado.
Por otro lado, el ministro Oz recomendará el uso de productos vegetarianos marca registrada y de botánicas, además de medicamentos de cuya venta sacará un corte o como dicen mis hermanos mexicanos, “la mordida,” en la que creen los de la familia Trump.
Qué tu cuñado y su esposa en cuya cocina las ollas y calderos tienen telarañas sean bienvenidos, aunque se les sirve en un plato para que no se repitan. En relación a los chistes, con las mentiras, los nuevos personeros de gobierno y promesas del presidente electo, es suficiente.
Felicidades para ustedes, paz y amor en las navidades y el nuevo año 2025, y calma con el festival de los drones. Les daré a conocer sus saludos a la señora Norma, don Abelardo y a los muchachos de la Voz Hispana de Connecticut, periódico “que no se compra ni se vende,” como decía el colega Vallines QEPD.
Titi Julia