Por Laura Glesby
Un centro de rehabilitación despidió a Alder Ron Hurt como terapeuta después de conocerse una relación sexual y romántica entre él y un paciente.
Hurt trabajó como terapeuta, y luego como supervisor, en el centro de rehabilitación de adicciones Retreat Behavioral Health de New Haven, hasta su despido a mediados de octubre de 2023.
Hurt, de 52 años, desempeña actualmente su cuarto mandato en el Consejo Municipal. También es pastor de la Iglesia Pentecostal Deliverance Temple Church.
El paciente ingresó en Retreat buscando tratamiento contra la adicción a los opiáceos.
Ambos comenzaron una relación sexual poco después de que el paciente saliera del programa.
Según el paciente, que tenía entonces 25 años, la relación duro unos seis meses. Pidió privacidad, pero suministró a The Independent su historial médico, probando que había estado en Retreat.
Según antiguos empleados de Retreat, alguien de la Asociación de Profesionales de la Adicción de Connecticut y el código ético nacional de la Asociación de Profesionales de la Adicción, esa relación viola las normas éticas y profesionales del tratamiento de adicciones.
Enterados en Retreat sobre la relación, despidieron a Hurt en octubre 2023.
Cuando se le pidió un comentario, Hurt dijo que hablaría con su abogado antes de discutir “mi despido” de Retreat.
Al preguntársele porqué mantuvo la relación, conociendo el desequilibrio de autoridad entre un terapeuta y un paciente, Hurt respondió, “No creo que fuera una cuestión de poder”.
En Rehabilitación: búsqueda e intercambio de números telefónicos
En noviembre de 2022, el paciente ingresó en el centro de Retreat del 915 de Ella T. Grasso Blvd.
Mientras el paciente se inscribía, Ron Hurt entró en la habitación y se presentó.
Según el paciente, Hurt se ofreció para registrarle desnudo y en las cavidades, procedimiento standard que se exige a los pacientes al inscribirse, para evitar el trasiego de drogas dentro del centro.
Los cacheos deben realizarlos técnicos o enfermeras; Hurt no es ni lo uno, ni lo otro.
“Me extrañó que se ofreciera para hacerlo”, recuerda el paciente, pero en aquel momento “no le di importancia”.
El paciente dijo que, durante el tiempo que estuvo ingresado en Retreat, Hurt fue “siempre amable conmigo”.
Una vez vino a mi habitación”. “Me pareció un buen tipo. Me atraía, no voy a negarlo”, dijo el paciente.
Antes de irse del centro, el paciente y Hurt, intercambiaron números telefónicos. Dos semanas mas tarde, iniciaron una relación romántica y sexual.
“Quiero que seas adicto a mí”
Mensajes de texto revelan cómo Hurt trató de conciliar esta relación con su papel de consejero en Retreat.
En uno de los mensajes, escribió: ” No quiero que abandones el IOP”, (programa de “tratamiento ambulatorio intensivo”.
“Bueno, no estoy drogándome, eso es lo importante”, respondió el paciente.
“Quiero que seas adicto a mí” le escribió Hurt, acompañado de tres emojis con la lengua fuera.
“Menos mal que lo soy”, respondió el paciente, quien agrega que intercambiaban mensajes a diario.
Según el paciente, principios del otoño de 2023, Hurt cesó el contacto a sin dar explicaciones.
Dijo que en algún momento envió un mensaje a Hurt diciéndole que quería volver a rehabilitación, pero él nunca le contestó. Finalmente, decidió no volver a Retreat, temiendo encontrarse con Hurt. Se fue a otro centro a recibir tratamiento farmacológico.
“La situación de mayor vulnerabilidad”
Según el portavoz del Departamento de Salud Pública del estado, Christopher Boyle, Hurt no tenía licencia en Connecticut para dar servicios de salud mental o de trastornos por consumo de sustancias, aunque por ley estatal (capitulo 383c, sec. 20 – 195bb), se le permitía ejercer de consejero debido a sus antecedentes como religioso. “Los religiosos o consejeros espirituales no están obligados a tener una licencia”, dijo Boyle.
Susan Campion, presidenta de la Asociación de Profesionales de la Adicción de Connecticut, afirmó que los profesionales del ramo no sólo aprenden los códigos éticos del tratamiento de la adicción, sino también sobre el precario estado psicológico de la mayoría de los pacientes por adicción.
“El paciente está en la situación de mayor vulnerabilidad, “por eso existe un código de etica”. Además de tomar medidas internas, Retreat denunció la conducta de Hurt al Departamento de Salud Pública (DPH) del estado.
Cuando se le preguntó acerca de cualquier investigación estatal sobre Hurt, el portavoz del DPH, Christopher Boyle, declaró: “No puedo dar detalles sobre ninguna investigación”.
Además de formar parte del Consejo Municipal, Hurt trabaja en New Haven Rising, un grupo afiliado a los sindicatos Unite Here.
También en su iglesia, Pentecostal Deliverance Temple Church, que tiene una página activa en Facebook en la que se identifica a Hurt como su “lider principal”.
La presidenta del Consejo Municipal, Tyisha Walker-Myers, dijo que había oído rumores sobre la conducta de Hurt, pero nada confirmado como para iniciar un procedimiento disciplinario.
Campion, de la Asociación de Profesionales de la Adicción de Connecticut, instó a cualquier persona que luche contra la adicción a buscar tratamiento. Según Campion, lo que está en juego en una posible recaída es exactamente la razón por la que las relaciones paciente-proveedor pueden ser hasta peligrosas.