Por Maya Mcfadden
A partir del jueves, las escuelas secundarias públicas de New Haven (NHPS), igual que las intermedias, exigirán a los estudiantes, para reducir las distracciones en clase, guardar sus teléfonos en estuches con cierre magnético Yondr, que, para ese fin, están siendo distribuidos, tal como fue informado por la superintendente del sistema escolar público de New Haven (NHPS), Madeline Negrón.
Negrón confirmó que el sistema hace lo necesario para implementar en las escuelas el programa desde el primer día de clases que es el próximo jueves, para reducir distracciones, promover mayor participación en las clases y que los alumnos estén menos expuestos al ciberacoso.
La campaña en las escuelas secundarias, viene después que NHPS distribuyera estuches Yondr a todas las aulas de 5.º a 8.º grado en marzo.
New Haven Academy (NHA) fue, desde el pasado año escolar, la primera escuela secundaria en experimentar los estuches Yonder, algo calificado de muy exitoso por la superintendente Negrón.
Negrón añadió que, desde la pasada primavera, los directores de secundaria iniciaron un diálogo con las familias y los alumnos sobre la introducción de Yondr, para obtener sus opiniones.
Negrón dijo que, según la política del distrito, de que los estudiantes deben utilizar los Yondr, los directores escolares pueden elaborar normas específicas sobre el uso del teléfono en sus escuelas. “Conocen a sus alumnos y saben qué es lo que mejor funciona”.
Ella dice que el programa piloto en la escuela secundaria y la implementación en los grados 5.º a 8.º, significaron cambios positivos en las escuelas estimulando al estudiantado a participar en debates presenciales.
Dijo que esperaba que también se notara en secundaria, ya que los alumnos que el año pasado cursaban 8.º grado y ahora pasan a 9.º traen su experiencia con los estuches Yondr.
“Como los más pequeños, cuando los alumnos superen el temor, notarán sus efectos positivos”, concluyó.
El director de operaciones escolares (CSO) de NHPS, Paul Whyte, añadió que los estudiantes de secundaria con trabajos o responsabilidades parentales fuera de la escuela, necesitando utilizar el teléfono durante el día, pueden ir a la dirección de su escuela y pedir permiso para hacerlo. También instó a los padres a llamar a la dirección de la escuela si necesitan comunicarse con sus hijos.
Un informe del 14 de agosto sobre mantenimiento de los edificios escolares, informa que ya hay dispositivos de desbloqueo Yondr en las paredes de las escuelas Hillhouse, Career, Metropolitan Business Academy, Co-op y High School in the Community y se termina la instalación en las escuelas ESUMS, Sound y Wilbur Cross.
Director escolar: Preparándose para el “impacto” en los estudiantes
En entrevista concedida a The Independent, el director de la escuela secundaria High School in the Community, Nick Perrone, afirmó que la experiencia implementando los Yondr en la escuela intermedia Edgewood el año pasado, le ayudará en su nuevo cargo.
Aunque Edgewood no tenía prácticamente problemas con el uso de teléfonos móviles, Perrone dijo que la introducción de los estuches Yondr fue “al principio planteó dificultades relacionadas con el vandalismo”. Perrone dijo que la respuesta más importante fue “hacer que los niños se responsabilizaran de cumplir la normativa”. Se propone repetirlo este año.
Dijo comprender la dificultad de la transición y espera que haya “inquietud” entre los estudiantes, aunque ya las familias han sido informadas durante las reuniones de orientación.
Piensa seguir diciéndoles a los alumnos y a los padres que “prescindir de los teléfonos nos permite interactuar con otras personas. Eso solo beneficiará al aprendizaje y ayudará a crear una relación sólida”.
En el caso de los alumnos de secundaria, Perrone afirmó que planea hacer que la política funcione mejor alentando a los estudiantes a elegir a un “adulto de confianza” en el edificio a quien puedan acudir para resolver sus necesidades personales. “No queremos que intenten resolverlo solos en el baño. Si un estudiante y un adulto de confianza llaman a sus padres al mismo tiempo, pueden ayudar a resolver”, dijo.
Sobre la preocupación de los padres por la imposibilidad de los alumnos de pedir ayuda en caso de emergencia grave, Perrone dijo que los responsables de hacer cumplir la ley han advertido de los problemas que conlleva la comunicación instantánea de todos los alumnos con un teléfono. Eso lleva, a veces, a que los operadores del 911, reciban docenas de la misma llamada en una emergencia.
Concluyó diciendo que espera que la prohibición de teléfonos reduzca el problema de las peleas entre estudiantes. Perrone dijo que, en lugar de que un estudiante “glorifique” las peleas e intente crear el próximo vídeo viral de peleas, la política de prohibición de teléfonos móviles hará que los estudiantes “sean más propensos a ponerse a salvo y a informar a alguien”. Es de esperar que esto les inste a actuar en lugar de quedarse como simples espectadores.
Representante estudiantil: Contar con las familias, no con los estuches
Por su lado, en entrevista realizada el miércoles, Abdellah Aly, representante estudiantil ante la Junta de Educación y estudiante de tercer año de la Career High School, dijo que no confía en el uso de estuches Yondr en las escuelas secundarias.
“Desde un punto de vista psicológico, quizá sea útil para alumnos de primaria e intermedia, pero cuando llegas a la secundaria, tu cerebro está algo desarrollado. Podría reducir la dependencia, pero esa función recae exclusivamente en los PADRES, no en el distrito escolar”, afirmó.
En lo relative a la seguridad, Aly cree que los estuches Yondr serán más un problema que una solución. “Ya hay numerosas restricciones en el mundo, y muchos países se están adaptando a la ley de seguridad en Internet. Eso ya es suficiente para mantener los teléfonos para uso educativo y de seguridad. No creo que mayores restricciones ayuden”.
Actualización: En un comentario posterior, Aly reconoció que es correcta la preocupación por excesos con las llamadas al 911 cuando los estudiantes tienen acceso a los teléfonos en la escuela. “En una emergencia real, docenas de llamadas simultáneas de los estudiantes podrían dificultar que los operadores filtren la información precisa y envíen rápidamente la ayuda adecuada”.
“Al mismo tiempo”, agregó, “no se pueden predecir las emergencias y una llamada o un video pueden ayudar la investigación. Además, ¿y si el estudiante tiene que llamar a su familia? Según la ley, si el estudiante rompe el Yondr, tiene que pagarlo pese a que, en una emergencia, es la ÚNICA opción.
En cuanto a que los estuches Yondr ayudan a reducir las distracciones en la escuela, Aly que los teléfonos distraen, por mensaje, por juegos. Sin embargo, los estudiantes alegan que a veces necesitan utilizarlos, ya sea para consultar su agenda, para hacer una búsqueda rápida o escuchar música, (lo que no afecta si no hay actividad o se está escribiendo un ensayo). No se trata tanto de distraerse como de disciplinarse sin perder el acceso al teléfono”.
Insistió en que los estuches Yondr pueden y deben utilizarse en la escuela primaria y “un poco” en la escuela intermedia. Pero en la secundaria, “Tu cerebro ya discierne si haces lo correcto o no. Yondr no deja ninguna opción. Los estudiantes pierden el derecho a opinar. La gente se queja a diario del liderazgo de NHPS, sin embargo, ¿qué pasa con nuestras quejas, nuestras opiniones? ¿Dónde están nuestros derechos en materia de propiedad personal?
Trato constantemente de lograrlo, pero no es una misión individual y pasará mucho tiempo antes que haya un sistema en el que los estudiantes puedan realmente tener voz y voto en muchos de los asuntos que se tratan en la Junta de Educación.