¡No vienen a las graduaciones! me dijo.
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Querida Tía, la saludo así porque la siento como una integrante de mi núcleo familiar donde lamentablemente no hay tías y solo tíos que no es lo mismo ni tampoco es igual.
Mis descendientes sí que las tendrán porque tengo a tres jovencitas de 12, 14, 16 que de ser buenas son buenas, pero yo diría que son tempranamente activas, es decir y como decía la trabajadora social, muy precosas.
Yo les he dado buen ejemplo y como soy de la iglesia Pentecostal “Gloria a Dios en las Alturas” de la hermana Wendy, las féminas usamos falda larga para no despertar la ponzoña y el veneno satánico de esas miradas perniciosas y nocivas que cuando vas a la marqueta en el Green te desnudan con miradas perturbadoras.
Lo que pasa es que en mi familia nos desarrollamos a muy temprana edad y desde niñas los tipos nos lanzaban piropos sobrepasados tales como ¡Ayyy mami que me das escalofríos! ¡Tienes 15 pero pareces de 12! Y cuando llovía, “¿Que les hace el agua a las flores?
Lamentablemente, en el mes de mayo pasado me llamó la trabajadora social para informarme que la más pequeña y de acuerdo a un guardia de seguridad llamado Cleto, éste la había sorprendido besándose con un muchacho de séptimo grado en el interior de un closet razón por la cual está suspendida y no participará en la graduación. Por este motivo tuvo que ir a la enfermera la cual me llamó a otra reunión para discutir “eso,” ¿usted me entiende?
Cómo si esto fuera poco, en la reunión con los padres una de las maestra de la segunda de mis hijas me llevó a una oficina privada y me mostró unas ropas que me extrañaron. Una de ellas era una blusa transparente de color azul cielo que según me dijo la señora Alfonsina reemplazaba a la blusa gris de manga larga con la que debiera ir a la escuela.
La blusa no tiene mangas y de acuerdo con doña Alfo que estaba más ceñuda que Melania con Trump, cuando Nina levantaba los brazos exhibía sin vergüenza la parte superior del torso mostrando, ¡Oh, Dios!, sus senitos. Me dijo dona Alfo que mi hija la puso en el Facebook y una plataforma llamada Senil.
La falda del uniforme se la ponía hasta la mitad del muslo por lo cual los muchachos se iban detrás de ella cuando subía las escaleras. Para colmo me mostró unas piezas de ropa interior de las que llaman hilo dental. “Hay dos estudiantes que se jartaron a bofetadas porque están enamorados de su hija. Por ahora está suspendida y tampoco participará en la graduación.
Gracias a tatita Dios que la mayor es más disciplinada, estudiosa y tiene un noviecito que trajo ya a la casa y con el cual, dice, se casarán ¡porque ya sucedió eso! Tía, si mi esposo se entera la va a caer encima y yo sufro para protegerlas de este hombre que se violenta cuando ve la cara de los enmascarados de Inmigración en California.
A las tres las he llevado a conversar con la Pastora, pero las más pequeñas se ríen de ellas diciendo que no son ovejas. Tía, no deseo creer que lo que parí con esfuerzo sean abejas de las malas porque me pican en el interior del motorcito y no sé qué hacer con ellas.
Tía necesito sus consejos ante de que comience la calor porque las tres desean usar en la playa los bikinis muestra cachetes. ¡Oh, No!
Gracias y cuídese de los truenos y relámpagos.
Milagros
Respuesta
Querida sobrina Milagros,
Menos mal que aún no llega el verano, hace algo de frio y tus nenas menores tienen que abrigarse, aunque el calor interno de la adolescencia y la sublime invasión de las hormonas les sacuden los impulsos. En las escuelas y según me contaba una trabajadora social me comentaba que las maestras, los encargados de seguridad y las para profesionales tienen que andar con ocho ojos, incluso el otro, para descubrir lo que está pasando en esta época en que el celular es una fuente de conocimiento, pero a la vez están los famosos apps, que mal rayo partan.
Debo decirte que en un tiempo se introdujo en el sistema escolar de Hartford una asignatura llamada la “Educación del Carácter” la cual se llevó a cabo porque se notaba ya en la década de los 90’ que las familias cesaban de acudir, como tú lo haces, a los centros religiosos para escuchar las palabras “virtud”, “carácter,” “decencia,” y “moral.” Lamentablemente al programa educativo, como muchos otros que iban y venían como de costumbre, se le acabaron los fondos y en estos tiempos en los que a las presidencias de los Estados Unidos ascienden asaltantes sexuales, felones y depravados, ya no hay decencia en los programas de televisión ni en los gobiernos.
Los modelos de vestuario desenfrenado los impulsan los artistas y no se si te enteraste, unas desvergonzadas obligaron a que en eventos artísticos internacionales se prohibiera que pasearan desnudas mostrando eso. Ahora bien, lo de los bikinis menudos están a la moda.
También y nos preocupa, estas niñas con el celular y el Facebook y las plataformas están expuestas a las promesas falsas de expertos asaltantes sexuales o también secuestradores que las desaparecen para explotarlas.
Busca para las muchachas programas positivos de deportes para que saquen esa energía mal orientada, se integren a grupos de jovencitas voluntarias y también exige charlas en la escuela con especialistas en estas edades que le digan al pan, pan y al vino, vino. Ahora en el verano les limitas el celular porque, aunque no les guste, tú y tu esposo son la autoridad y algún día en el horizonte te lo agradecerán.
La idea de enviar a la más chica y rebelde a Puerto Rico donde tu hermana no es recomendable, por ahora. La mayor que considere lo que es estar casada y desde ya dile que tú no estás para criar nietos.
Milagros pídele a la Pastora un milagro porque el camino es de subida.
Tu Tía
