…a quien no lo quieren en Escocia, país donde nació su madre
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Magnífica Tía Julia,
Mi querida distinguida esposa Carliña y este pechito somos residentes con pasaporte y licencia de conducir en el pueblo de Ansonia donde pasan cosas raras de las que informan ustedes. Habitamos unos condemonios para adultos mayores donde debemos pagar 700 dólares mensuales, ($8,500 al año) para que mantengan el aseo exterior, saquen la nieve, recojan las hojas del otoño y otras nimias y minúsculas funciones. Todo esto lo decide una asociación que mal rayo parta.
Como mal informan los meteorólogos que pronostican el clima usando las palabras “quizás,” “tal vez,” “por ventura,” “acaso,” “a lo mejor,” “es posible, o ”hay algunas probabilidades,” hasta ahora nos han azotado temporales, vientos, truenos, tormentas eléctricas, borrascas, torbellinos, ráfagas y diluvios que provocan desastres que ahora con los diabólicos cortes de presupuestos del presidente en FEMA, el gobierno no ayuda ná.
Con Carliña estamos asustados por un posible mes de agosto más tormentoso que el futuro que le espera al presidente cuando regrese de Escocia por el asunto de su apego a las niñitas de 13 años. ¡Oh, Dios!
La cuestión tía e ingresando a mi problema es que, con las actuales tronadas y caídas de rayos, mi esposa que es muy sensible e impresionable está sufriendo brutales pesadillas muy malas donde se le aparece el llamado Enano Maldito que aparece en los programas de la Doctora Polo del cual se dice que no se sabe si es que es chico o le quedan los zapatos hondos. Este extraño ser, la amenaza con que nos caerán encima bombas nucleares y que la gasolina subirá al precio de 10 dólares el galón debido a la terrible inflación Trompiana. ¿Tendremos que usar bicicletas?
¿Pasará con nosotros lo mismo que sucede ahora en Ucrania, en los momentos en que la presidenta de México se ha hecho amiga de Rusia y China para el caso de que el presidente Trump invada a este país a través del golfo del cual él se apropió cambiándole el nombre a Golfo de América? Ahora lo apodan NapoLEON Chico
De acuerdo con mi esposa que lee acerca de esto y es sabida, un señor Nostradamus de quien no tengo su celular había pronosticado una tremenda batalla final entre naciones. También me insiste en que los pastorcillos de Fátima dijeron que el acabose tendría lugar a los cien años de la Aparición de la Virgen, para el aniversario de la aparición, pero la fecha ya ha pasado y nada.
Para calmarla le he dicho a mi distinguida esposa que, si está tan nerviosa nos vayamos a California, pero a ella le asustan los temblores, huracanes, terremotos y los Tsunamis.
Tía no sé qué hacer ya que somos adultos mayores y a mí la espalda me suena más que una castañuela y mi rodilla izquierda no me responde al subir escalas. ¿Debiéramos mudarnos a Portugal donde además de la forma extraña como hablan el español, no hay temblores y la gente es nice?
Esperamos que usted nos recomiende un lugar del mundo o USA para estar tranquilos, nos despedimos y ojalá no sea para siempre ya que deseamos ser optimistas. Sin embargo, por su edad uno nunca sabe.
Manueliño
Repuesta.
Mira Manueliño,
¿Eres tú brasileño, pero admiras a Portugal que fue el imperio que esclavizó a Brasil? ¡Oh, Dios!
El temor y pavor colectivo a las plagas, guerras, cometas, aerolitos y el calor excesivo producto del cambio climático es algo real, aunque los del gobierno lo niegan, pero que debiera preocupar no solamente a las mujeres como a tu distinguida y garbosa cónyuge Carliña, sino que a los varones machistas.
Yendo a las raíces bíblicas que menciona Carlina específicamente en el Viejísimo Testamento y un padre que hace las misas en latín, allí se describe con detalles la difícil historia del pueblo judío, sus batallas, guerras interminables, desmadres, invasiones, y tenebrosa esclavitud, aunque ahora los sionistas y ortodoxos le caen encima sin lástima ni respeto a los palestinos en Gaza a los cuales están matando de hambre.
Recuerda que en la Biblia judía se menciona también el primer asesinato debido a un cambio de palabras entre los hermanos Caín y Abel que diferían en la cuestión política y no pudieron ponerse de acuerdo en cómo repartirse los territorios, la propiedad de ovejas y las compensaciones financieras.
Desde allí en adelante continuaron las bataholas y los genocidios como los cometidos más tarde por Julio César que prácticamente exterminó a los así denominados “bárbaros,” que es el pérfido nombre que nos atribuye a nosotros los latinos el señor Trump y sus secuaces.
En cuanto a eso de mudarse a otro país sin terremotos, maremotos, volcanes y los anuncios de apocalipsis; ¿qué les puedo decir? Mijo, en todas partes se cuecen habichuelas y mote y para comenzar de nuevo a vuestra edad y con todo los traqueteos de encontrar sistemas médicos como los de acá, la cuesta se pone de subida. En California la cosa esta difícil por la falla de San Andrés.
En cuanto a países o islas seguras, que yo sepa no queda ninguna, salvo que deseen radicarse en Noruega o Dinamarca donde hace mucho frío y las noches son tan largas como un día lunes.
Por eso, os digo, tengamos fe en que prevalezca la racionalidad y buen juicio de los gobernantes y que aparezcan más mujeres en tareas gubernamental que no sean necesariamente blancas. En relación a la castigada naturaleza por la mano humana, hay que exigir a nuestras autoridades en los municipios y de allí para arriba que inicien una campaña para exigir que los políticos estén conscientes del peligroso calentamiento global y los difíciles momentos en que nos tocará respirar y vivir.
Hasta hora el verano ha estado tan ardiente como ese tipo caliente que planchaba los pantalones con la mano. Ya puse con la ayuda de mi sobrino Pablito la unidad de aire acondicionado en mi hogar y me cuido. Saluda a Carliña y disfruten de los días normales que llegarían, quizás, en septiembre ¿Qué tal la vacuna del cuarto reforzamiento? Escuchen siempre al gobernador Lamont que informa bien y como recomiendan los siquiatras, no miren mucho las noticias de la guerra, no le crean a Trump, salgan a caminar, respiren hondo y echemos pa’lante.
Tía Julia que los quiere con fervor