La democracia es increíblemente frágil, descansa sobre la confianza de los gobernados en que los gobernantes están capacitados para garantizar bien común, seguridad pública y estabilidad económica.
Una seria crisis de confianza asaltó a Inglaterra, que tenía la democracia y moneda más sólida del planeta. Con tres primeros ministros, y cuatro ministros de economía en tres meses, su moneda sobrevive artificialmente, es inorgánica.
En Estados Unidos, Europa y todo el mundo, la población perdió confianza en los gobernantes, demostraron su incapacidad de preservar la vida durante la pandemia de Covid19.
Murieron casi siete millones, es difícil pedirles a sus familiares confiar en gobiernos incapaces se salvar sus vidas.
Demostraron que no pueden garantizar viviendas, alimentos, y combustibles a precios asequibles, ni seguridad pública, ni estabilidad económica.
La incapacidad demostrada por gobernantes, explica la desconfianza y la altísima abstención electoral, esto terminará matando la democracia.
Esto está fríamente calculado, por eso señalan con el índice la “peligrosa amenaza fascista, neo-nacista, autoritaria”, que son los “únicos” que disienten de la clase política.
Crearon todos estos problemas, advierten, que si salimos de ellos, mañana será el Apocalipsis, ya el presidente Joe Biden habló del “Armagedón” (Apocalipsis 16:16), no hay alternativas.
El “Acta de Reducción de la Inflación” del presidente Biden, aprobada en agosto, implica emitir $700,000 millones inorgánicos. El efímero gobierno de Liz Truss en Inglaterra emitió unas £60,000 millones inorgánicas en octubre.
Entre finales del próximo verano y la primavera siguiente, esas emisiones monetarias inorgánicas destruyan las riquezas de quienes estén por debajo de la clase media alta.
También destruirán toda la confianza que aun quede en los gobernantes, para que se cumplan las escrituras, entonces “reconstruiremos todo mejor”, según el lema de Biden.
Después vendrá “El Gran Reinicio” que promueve el Foro Económico Mundial, así está escrito, y así será cumplido.