El equipo parisino vuelve una vez más a demostrar todo su poderío futbolístico ante un aguerrido onceno brasileño que tuvo una oportunidad gigante de haberse consagrado como campeón de la Copa Intercontinental, pero que tuvo que conformarse con un segundo lugar por la gran actuación del arquero ruso Matvey Safonov, del PSG, quien les atajo cuatro penales, asegurando el titulo para su equipo el Paris Saint Germain, que con este nuevo trofeo, y los que ya había ganado como La Ligue 1, Copa de Francia y su primera Liga de Campeones en la temporada 2024/2025, lo convierten en el primer onceno francés en ganar este prestigioso torneo para las arcas de su institución; cerrando así con broche de oro un ano memorable y todo bajo el mando del director técnico español Luis Enrique.
En un partido intenso en el Estadio Ahmad Bin Ali en Catar, los equipos PSG y Flamengo, salieron a la cancha con sus mejores once, y dispuestos a dar la batalla por un trofeo que se necesitaba en sus arcas. Desde el portazo inicial, se sabía que íbamos a ver un partido de dos técnicos jóvenes, cautelosos y llenos de osadía. Ambos equipos salieron a la cancha cautelosos, precavidos y sin dar oportunidades ni cometiendo errores. Los dos sabían que el primero que descuidara su arco, las consecuencias serían fatales. Los dos equipos mostraron su típica presión alta, presionar a la zona defensiva era lo ideal, no dejar salir desde atrás con el balón a su rival era el objetivo, y el partido por momentos se mostraba aburrido y lento, pero ojo, que esto era parte de esa final.
Con ese accionar se produjo la primera anotación para el conjunto europeo, en una jugada que no aparentaba ser muy riesgosa por el lado derecho, se ejecuta un centro de Joan Neves, que Agustín Rossi, el portero del Flamengo, no pudo despejar y es el mismo Kvaratskhelia quien aprovecha el error y la envía al fondo de la red cuando transcurría el minute 38 de la primera parte. Así se despertaron las reacciones del conjunto brasilero, y de su técnico Felipe Luis, que con movimientos en sus manos les decía a sus muchachos que pusieran más cuidado y que se calmaran. Desde ahí comenzó un partido diferente porque los sudamericanos comenzaron a presionar más por los costados, arriesgando aún más que le marcaran el segundo gol.
Para la parte complementaria, Luis Enrique, saco un equipo más defensivo, más precavido y más sólido en su zona posterior, porque sabía del potencial que tenían los sudamericanos; y así fue, los nuestros se fueron al ataque y cuando transcurría el minute 62, es el mismo Marquinhos, que con ingenuidad le comete una falta dentro del área a Giorgian De Arrascaeta, y el árbitro decreta el tiro desde el punto penal. El cobro lo toma Jorginho, quien tiene un buen historial con el cobro de estas infracciones y que tiene la calma y la sabiduría para ejecutarlos con precisión y esta vez no fue la excepción. Tomo su distancia y en una carrera vacilante, engaño al arquero ruso Safonov, que tuvo que conformarse y sacar el balón del fondo de su red. Con este gol, se empataban las acciones 1-1. Esto animo aún más a los muchachos del Flamengo, que sabían que podían hacer historia ante uno de los rivales más poderosos de Europa y especialmente de la Liga de Francia.
Los últimos minutos estuvo lleno de muchas oportunidades tanto para los franceses como para los brasileños, Marquinhos, solo frente a Rossi, la envía fuera del arco, luego Dembele y así sucesivamente los delanteros de ambas escuadras desperdiciaron varias opciones de gol y se tuvieron que conformar con el empate e irse a la tanda desde los doce pasos. Y como yo siempre he dicho: “En un penal hay solo una oportunidad de anotar y tres que pueden fallar (el palo, el arquero o enviarlo fuera del arco), y en esta oportunidad fue Matvey Safonov, quien con una espectacular actuación pudo detener cuatro de los cinco penales que se ejecutaron en su contra. El ruso que llego al club parisino en el 2024, y que estuvo en el banco del equipo como suplente de Gianluigi Donnarumma y Lucas Chevalier, hoy se convirtió en el héroe de su club. A sus 26 años, el arquero ruso, llego proveniente del FK Krasnodar, equipo que estuvo desde las inferiores hasta el 2018, donde subió a la primera división. De allí llegó al Paris Saint Germain, por una suma de 20 millones de euros. En esta temporada acumuló 20 partidos como suplente, hasta que se le dio la oportunidad ante la lesión de Chevalier, y Luis Enrique, le dio toda la confianza a Matvey, que con sus 1.92 mts fue casi implacable en las atajadas desde el punto penal. Contuvo los remates de Saul, Pedro, Leo Pereira y Luis Araujo, el único que le pudo marcar fue Nicolas De la Cruz.
Por otro lado, el arquero Argentino Agustín Rossi, solo pudo contener uno de los cobros, pero sin lugar a duda, tuvo una excelente actuación debajo de los tres palos del conjunto brasileño durante los noventa minutos. Los goles son amores y ahora los parisinos son los que celebran hasta el 2026.
Feliz Navidad y Feliz Año Nuevo para todos 2026…