Querida Tía:
Aprovecho la oportunidad de desearle a usted y a los muchachos y los no tan muchachos de La Voz un Feliz San Valentín que ya se acerca tan aceleradamente como yeguas galopantes escapando del Ómicron.
Por acá por Willimantic los leemos mucho y nos ayuda a informarnos de lo que pasa en otras partes de Connecticut lo cual es justo y necesario. La verdad es que, si no fuera por ustedes, estaríamos tan incomunicados como una isla sin mapa.
“Yendo al punto” como decía mi maestra de gramática y sintaxis allá en el hermoso pueblo de Barceloneta, debo confesarle que soy educadora muy bien educada en una escuela elemental de un pueblo que prefiero mantener en secreto ya que de allí es mi novio.
Resulta que este muchacho que también enseña, pero matemáticas; tiene una afición de poeta y a mi me conquistó con unos versos que aun guardo y que no me parecen mal, quizás porque se refieren a mi persona, pero que, hablando francamente, no creo que den para que se haga un vate de alturas ni los publique en esta ni en la próxima vida.
Una amiga mía que enseña en Central Connecticut me dice que el problema es que su calidad poética es inconsistente ya que en algunos de sus versos comienza a volar como las águilas y terminan con unos tercetos con aspecto de gallina embarazada, es decir, volando muy bajo. Me permito enviarle una oda que me dedicó recientemente para que usted vea lo que hay.
Oda a mi amada mía
¡Oh! Dulce y fantasiosa gacela alegórica,
Alucino tu nombre al entregarme a Morfeo,
Tu voz cristalina sin embargo me despierta,
Y libera mi conciencia de la niebla y
Del infinito universo.
“Casi,” “casi,” “casi” es mi apellido,
¡Oh! Si pudiera alcanzarte
Cuando alzas tu vuelo raudo
Y te vas por el espacio persiguiendo al aire,
Y yo humilde mortal te miro desde el suelo.
¡Y aunque trato! no logro agarrarte,
Múcura juguetona, resbaladiza golondrina,
Gotera mía, ya no puedo contigo.
¿Qué le parece? Como me la dedicó, la acepté, pero hay cosas que dice en el poema que no pegan ni juntan, tal como lo son la honradez unida a la política lo cual es muy extraño. A algunas de mis amigas les gusta la primera estrofa, pero encuentran que, en la segunda, especialmente cuando me compara con una múcura y me trata de resbalosa, se le va la mano y lo que hace es jugar con las palabras sin ni siquiera revisar con más cautela el diccionario de la Lengua de Cordero Castellano.
Ahora le ha dado por cultivar ditirambos y sonetos de escarnio que quiere dedicar al expresidente que fue derrotado y yo le he dicho que se quede tranquilo ya que esa gente es peligrosa y vengativa, además que andan buscando demandas y le pueden quitar la casa.
Quisiera ayudarlo a progresar, pero no tengo el tiempo para leer unos mamotretos donde escribe sus ocurrencias y changuerías.
Quiero que por favor me aconseje y ayude a orientar a este muchacho que, de ser bueno, es bueno, pero que con esto de sus poesías se pone más cargante que préstamo estudiantil.
Sinceramente,
Mildred Cuevas del Hoyo
Respuesta
Mildred, amiga mía:
Gracias por tus saludos que transmitiré con gusto a Don King, la señora Norma, al señor Gracia y Limeres.
Yo recibo muchas cartas y he aprendido a darme cuenta cuando detrás de supuestos problemas viene escondido como un gas, el vacilón. No quiero decir que dude de la realidad de tus problema ni de tu veracidad, pero como están las cosas me he puesto más suspicaz y saltona que gata de campo.
La poesía es algo interesante que implica desafíos estéticos (no confundir con estíticos), un conocimiento pleno del idioma, y aspectos de forma y fondo que no son fáciles de superar. Pero lo más importante además de la voz poética, es la reflexión y la creatividad.
Lo que se escribe debe tener un mínimo de originalidad, aunque nada en poesía es realmente original. ¡Es que hay tantos poetas nuevos aun influenciados por estos señores Neruda o Rubén Darío, que a veces espantan porque copian mal con eso del amor simbiótico o los cielos donde titilan las estrellas, astros y aerolitos en el cielo!
Como dice tu amiga, la primera estrofa de este tipo de verso libre que me enviaste no estaría tan mal, pero habría que escribirlo de nuevo y tal vez botarla al zafacón.
La expresión ¡Oh! suena más de moda que la que usan los aleluya que esperaban el choque del planeta tierra con el aerolito. Esa interjección está más pasada de moda que esas cantantes del patio que usan pistas fatulas en sus actuaciones y una no sabe si la voz de la pista supera a la voz real o viceversa ya que las dos son malas.
Con respeto a Morfeo, el gato dormilón, también está pasado de moda y tu novio debe tener cuidado ya que por estos lados reina a veces la ignorancia y algunas personas pueden creer que es gay. La imagen de la “voz cristalina” era usada en el siglo XV, o quizás antes, y esta más pasada de moda que corsé de alambre.
Lo de la gacela (pobre animalito en proceso de extinción gracias a nosotros), también se derrumba en lugares comunes sobretodo con eso de “alegórica” que no pega ni junta. “Vuelo raudo,” “humilde mortal” y la otra sarta de disparates son claramente escritas por un aficionado que no ha estudiado lo suficiente para interiorizarse del desarrollo de la lengua española y de la evolución siempre incierta de la poesía.
Como decía en forma prosaica el filósofo Héctor Vallenar que ya está calvo, “el papel da para todo” y por eso algunas personas creen que escribiendo palabras raras que sacan del diccionario o copian cuando construyen un poema, serán más famosas que Hillary. Pero es que no es fácil, no es fácil.
Algunos por allí caen en la simple musicalidad de la décima que suena bonita, pero que al igual que las cafres letra de las canciones de ¡Viva!, no se elevan a la poesía y su aureola de misterio, reflexión y mensaje cósmico o cómico.
Es más, aquí transcribo unos versos de este gran Juan Antonio Corretjer y aunque utiliza la “décima,” crea una tensión de madre al reflexionar acerca del paso del tiempo en relación a nuestro destino incierto de seres de carne, sangre y huesos, del que ya había hablado hace más de quinientos años Jorge Manríquez.
“En la vida todo es ir,
A lo que el tiempo deshace,
Sabe el hombre donde nace,
Y no donde va a morir.”
¿Te fijas? Sin tanta palabrería hueca ni gacelas infinitas o cielos vacíos de esperanza, un verdadero poeta construye sus versos utilizando pocas palabras, una reflexión profunda que nos pone en nuestro lugar, es decir no somos mucho, ni sabemos demasiado acerca de hacia donde vamos ni de donde venimos. Pero este es nuestro destino en la vida, crecer, madurar, avanzar, y finalmente morir. ¡Huyyyy!
¡Que tu admirador te regale bien para San Valentín ojalá un Chanel 5!
Saludos, de tu Tía que te compadece y te quiere.
Julia.
Comentario a los Sabios Consejos de la Tía Julia.
Tía, la juventud está del mero. Mi hijita de 17 se fue a una fiestecita en el college, llegó infectada con el Covid-19 y ahora todos estamos en cuarentena. A veces creo que por más que estudien los muchachos se ponen más y más bobos con el texteo y la jodienda. Para distraerme en este cautiverio leo La Voz y me concentro de los consejos de las muchachas porno que enseñan mucho y hablan de todo, incluso de aquello.