NEW HAVEN.- El comité financiero de la Junta de Concejales cursó una invitación oficial a la Universidad de Yale para que aportara otros $2,5 millones de dólares a la ciudad.
“Esta enmienda (presupuestaria) intenta pedir a todas las partes interesadas que den un paso adelante. Eso incluye ciertamente a la administración y al personal de la ciudad – porque hay recortes que se requieren y que no se propusieron – y también a algunos de nuestros principales aliados en la comunidad. Les estamos pidiendo que también den un paso adelante”, dijo el Vicepresidente del comité Adam Marchand, Demócrata del distrito 25.
Se envió una solicitud de opinión a Yale. Yale ahora hace un pago voluntario a la ciudad cada año de casi 12 millones de dólares.
La enmienda que el comité aprobó, incluía varios cambios en el presupuesto propuesto por el alcalde Justin Elicker de 569,1 millones de dólares para el próximo año fiscal, que solicitaba un aumento de 1,53 millones en la tasa de impuestos. El consejo en pleno votará la adopción del presupuesto en una reunión especial el 26 de mayo.
El comité votó a favor de modificar el presupuesto para disminuir los gastos en 6,7 millones de dólares y aumentar los ingresos en 2,9 millones de dólares. Con los subsiguientes 9,6 millones de dólares en ahorros, la enmienda aplicó 4,8 millones de dólares para reducir la tasa de impuestos a 43,76 milésimas, un aumento de 0,75 milésimas, y destinar 4,8 millones de dólares a un fondo de reserva.
Del aumento esperado en los ingresos, el presupuesto proyecta 400.000 dólares de un plan del concejal Sal DeCola, Demócrata del distrito 18, para aumentar las cargas de los permisos de construcción para proyectos de más de 10.000 pies cuadrados.
En las sesiones virtuales sobre el presupuesto, tanto antes como después de que el comité celebrara talleres con cada departamento de la ciudad, cientos de residentes, incluyendo estudiantes, funcionarios sindicales y residentes de largo tiempo en la ciudad, asistieron para hablar a favor de aumentar la contribución de Yale a la ciudad.
Las propiedades exoneradas de impuestos de la universidad, constituyeron el 42 por ciento de la lista de propiedades en esa situación de New Haven, mientras que las propiedades exoneradas de impuestos del hospital, añaden otro 9 por ciento. En total, la Universidad de Yale y el hospital no tienen que pagar 190 millones de dólares en impuestos a la ciudad por sus propiedades no sujetas a impuestos. Los residentes también lamentaron los recortes anuales a los servicios de la ciudad, mientras que Yale tiene una dotación de 30,3 mil millones de dólares.
“Es una lástima que tengamos que pelear y quejarnos por los centavos cuando tenemos instituciones tan grandes”, dijo la concejal Evelyn Rodríguez, Demócrata del distrito 4. “Si Yale nunca nos da un centavo, deberían tener conciencia de que la partida (artículo) está incluida.”
Yale también es el mayor empleador de New Haven, con cerca de 14.000 profesores y personal, y ha accedido a contratar más personal en los barrios de bajos ingresos.
En respuesta a críticas anteriores, Yale ha enumerado las contribuciones que hace a la ciudad, como los 5 millones de dólares en impuestos sobre la propiedad de sus propiedades no académicas y los 5 millones de dólares anuales por concepto de pagos de permisos.
La universidad agrega que atrae turistas a la ciudad, apoya a las escuelas como cofundador y principal financiador de New Haven Promise, habiendo contribuido con 4 millones de dólares para cubrir la matrícula completa en cualquier universidad pública del estado para los estudiantes elegibles de las escuelas públicas de New Haven. Desde 2014, el programa ha otorgado becas a 1.900 estudiantes y ha colocado a 400 pasantes remunerados en Yale.
Refiriéndose al presupuesto de la ciudad, el concejal Charles Decker, Demócrata del distrito 9, dijo que tenía “problemas con la retórica de la austeridad”, aunque la propuesta de presupuesto aprobada por el comité, pide aumentos de impuestos y recortes a los departamentos de la ciudad.
En una sesión con el comité financiero, el director financiero de las escuelas públicas de New Haven, Phil Penn, presentó varias estrategias de saneamiento para gestionar un aumento de 3,5 millones de dólares, tal y como propuso Elicker. DeCola se negó a aceptar la repetida descripción de las escuelas como “sin fondos suficientes” y Furlow reprochó a los funcionarios de la escuela por no tomar “decisiones difíciles” como el cierre de una escuela. Penn advirtió que si la junta escolar no recibe los 3,5 millones de dólares propuestos por Elicker, no ve cómo el distrito podría presentar un presupuesto equilibrado sin eliminar los puestos de personal certificado.
Luego de presentar el recorte de 2,5 millones de dólares a la propuesta de Elicker para el presupuesto del consejo escolar, Marchand dijo que habría una discusión sobre el tema más tarde, pero el tema no se volvió a presentar.
Además de reducir la demanda de aumento de la junta escolar, el presupuesto revisado pide que Elicker elimine 3,9 millones de dólares en gastos operativos de distintos departamentos del distrito escolar.
La concejal Anna Festa, Demócrata del distrito 10, intentó hacer varias consultas para conseguir más ahorros para reducir aún más el aumento propuesto de la tasa de impuestos; DeCola y Furlow se irritaron durante el cuestionamiento de Festa en la sesión de presupuesto.
A pesar de haber hecho varias recomendaciones dentro del paquete de enmiendas, Festa fue la única que votó en contra de la aprobación de la enmienda al presupuesto de Elicker, alegando que necesitaba más tiempo para considerar el impacto fiscal que el paquete aprobado tendría en la ciudad.