Tomas Z. Miranda, de 77 años de edad, falleció el 16 de mayo de 2021. Le sobreviven su amado hijo, David, y su nuera Diane Miranda, con quienes vivía. Su nuera, Stacy Hyatt. Sus nietos, Mathew Miranda, Marissa Miranda y Jonah Miranda Hyatt. Su hermana, Elizabeth (José) Castro. Sus cuñadas, Olga Miranda y Ana Miranda. Muchas sobrinas y sobrinos. Le precedieron en la muerte sus padres, Zoilo Miranda y Rosa Ortiz Miranda y su madrastra, Tita Miranda; su hijo, Paul Miranda, sus hermanos Reuben Miranda y Joe Miranda. El Sr. Miranda, había sido profesor de inglés para hablantes de otros idiomas (TESOL) y educación bilingüe por más de 40 años. El Sr. Miranda se jubiló como supervisor de educación bilingüe y programas de ESL para las Escuelas Públicas de New Haven, New Haven, CT. Comenzó su carrera como maestro de TESOL en las Escuelas Públicas de Gary, Indiana, donde también fue fundador del Programa de Educación Bilingüe de Pre-Kínder a Tercer Grado y del Programa de Educación Familiar Latinoamericana (ahora conocido como La Casa). En 1972, se mudó a Bridgeport, Connecticut, donde estableció y dirigió el Departamento de Servicios de Educación Bilingüe, educación infantil y fundó la Escuela Magnet Multicultural, una escuela que se enfoca en los idiomas y culturas español, portugués e inglés. Participó activamente en la Asociación de Connecticut para la Educación Bilingüe Bicultural (CABBE), los Maestros de Inglés para Hablantes de Otros Idiomas de Connecticut (CONNTESOL), la Asociación Nacional para la Educación Bilingüe (NABE) y el TESOL Nacional. Trabajó con la legislatura del estado de Connecticut y Connecticut. Departamento de Educación en la aprobación de la ley de educación bilingüe y los reglamentos para la certificación de educadores de educación bilingüe TESOL. El Sr. Miranda continuó participando en la preparación de educadores bilingües, TESOL y multiculturales y en el desarrollo de programas bilingües en todo Connecticut incluso después de su jubilación. Tomás tenía una hermosa voz y disfrutaba cantando con muchos coros. Le encantaba viajar. Sobre todo, le encantaba pasar tiempo con su familia y amigos. Todos lo extrañaremos mucho.
Tomas Miranda, maestro, amigo y defensor de las familias y los niños de las Escuelas Públicas de New Haven. Tomás, aunque siendo una persona tranquila, era conocido por su profundidad y amor por su oficio de educador. Por todo su legado, todavía sigue siendo una leyenda en nuestra comunidad.
Los niños de New Haven alcanzaron un desarrollo educativo, porque Tomas aterrizó en New Haven en la década de 1970 decidido a luchar por la Educación Bilingüe y detener la práctica de que nuestros estudiantes hispanos tuvieran que repetir uno o dos grados hasta que dominaran el inglés lo suficiente para competir con compañeros “unilingüe” de inglés. Los que lo conocieron sabían que su misión y principal prioridad era el estudiante aprendiz de inglés (English Lerner), nadie cuestionó jamás su integridad al respecto ni su lucha por la igualdad. Fue respetado en todos los ámbitos de la sociedad y nunca nos dio la espalda. Gracias, Tomas por ser real y mantenerte real y nunca camuflar.
Carmen Ana Rodríguez
La trayectoria de Tomas Miranda fue larga y llena de obstáculos y triunfos. Pero el que las cosas fueran difíciles o imposibles nunca lo detuvo. Desde Pre K en Bridgeport hasta director de educación bilingüe en New Haven, principal de la escuela Silvermine en Norwalk- o en Hartford trabajando para el Departamento de Educación, Tomas nunca dudaba o titubeaba: Tomas era de Connecticut, no de un solo distrito. Su trabajo en el área de educación bilingüe y certificación le dio aliento a muchos que pensaron que nunca tendrían sus licencias o cursos para poder conseguir empleo. Y peleó siempre por el derecho de nuestros niños y familias a recibir una educación sólida y en dos idiomas. Tomas siempre daba, sin esperar nada. Después de jubilarse siguió enseñando, entrenando, y le dedico muchísimas horas a uno de sus proyectos preferidos: Casa Otoñal en New Haven. Mi amistad con el comenzó en 1977 y llenar el espacio que ocupó en mi vida profesional y personal será imposible. Pero le recordaré en la playa de West Haven y en las montañas de su pueblo natal, Aibonito. Descansa en paz, querido amigo y maestro.
Y como cantaba Mercedes Sosa en una de sus canciones preferidas: Gracias a la vida.
Myrella Lara
La pérdida de un ser querido inevitablemente nos trae tristeza. Todos sabemos que algún día vamos a morir, pero aceptar el hecho de que alguien de nuestro entorno ya no se encuentra con nosotros es algo penoso que no se asume fácilmente. Tomas fue un gran amigo con quien compartí alegrías, celebraciones, lágrimas y rizas. Recuerdo a Tomas como un amante del teatro, la música, el arte, el bilingüismo, y la educación. Tomas creo el programa “Tres Amigos”, el cual tuve el privilegio de dirigir. “Tres Amigos” era un programa en el que estudiantes de New Haven, Hamden y Orange aprendían español. Nos reuníamos los sábados y muchas veces Tomas llegaba y con mucho entusiasmo participaba con los estudiantes. Tomas fue el quijote que defendía sus ideales ante todos hasta que lograba su objetivo. Vuela alto mi amigo.
Maritza Rosa
El otro día le comenté a Peter acerca de la primera vez que Tomas visitó mi clase de Inglés como segunda lengua en la escuela Roberto Clemente, cuando yo apenas comenzaba a enseñar. Los estudiantes estaban leyendo una obra en voz alta y necesitábamos otro personaje. En ese momento quien entra por la puerta? Tomas! Sin dudar un segundo tomó asiento y empezó a leer, como un experto. A los niños les encanto! Esos eran los días de pruebas, exámenes y más pruebas de aprovechamiento. Tomas era un verdadero humanista, algo que se ha perdido en nuestro sistema educativo. Fue una bendición el haber trabajado a su lado!
Norine Polio
No hay palabras para describir el dolor que provoca la partida de un colega, un buen amigo. “Cuando un amigo se va…”
Tomás fue un titán, un luchador por los derechos de igualdad de los niños que llegan a nuestras aulas sin conocimiento del idioma inglés. Fue abnegado promotor de la apreciación de la diversidad lingüística y de la aportación histórica, cultural y sociopolítica de la comunidad Latina en Connecticut y a través de los Estados Unidos. Pero más allá de su contribución como educador en la esfera profesional y de la causa humanitaria a la cuál se abrazó por tantos años, Tomás fue un gran ser humano, un gran padre, un gran hermano y sobre todo un gran amigo. Fue amigo de todos. Mas la calidad de su amistad con ustedes es caracterizada por su constancia, por el amor y la abnegación mutua. Es esta la amistad que prevalece en las altas y en las bajas, en los buenos momentos y en los difíciles…la que no se mide con el tiempo y que conquista la distancia, perdurando así más allá de la muerte.
“Cuando un amigo se va…” el vacío lo llenan los recuerdos de los momentos compartidos, el abrazo afectuoso que sigue dando su calor y el eco infinito y resonante de las palabras que llenan el espacio con amor eterno, mutuo y sincero.
Afectuosamente para ustedes en celebración de una vida bien vivida,
Lisette Bernier-McGowan
Tributo a Tomas
Tomas Miranda nos cubrió con destellos de bendiciones desde las alturas (digo eso por su alta estatura) y todos los que estuvimos en su alrededor las recibimos. Y yo tuve la fortuna de pertenecer a este grupo de colegas y amigos. En el Programa Bilingüe de New Haven él fue un hombre totalmente profesional: inteligente, dedicado, con mucha compasión. Pero esa persona tan profesional podía transformarse, en un segundo, en la persona más humilde y auténtica, con un interés genuino por todos los que le rodeaban.
Tomas expresaba sus sentimientos, fuese alegría, mal humor, apoyo o tristeza. Creo que esta era la razón que nos acercaba tanto a él. La pretensión o artificialidad no existía en Tomas.
Fue un hombre muy humano el cual fácilmente comprendía y se conectaba con todas las personas que se cruzaban en su camino. Tomas tenía una bella voz y mucha apreciación por la música. Por ello fue un miembro muy apreciado y querido del grupo coral de New Haven, el Greater New Haven Community Chorus. Tomas encontraba el humor en las cosas diarias y no puedo pensar en Tomas sin pensar en su sonrisa.
Y todavía oigo su risa. Y ese recuerdo me hace sonreír, aunque sea entre lágrimas.
Dr. Kay Hill
Hoy recuerdo con gran emoción mi primer trabajo de maestra en Bridgeport. Acababa de graduarme de la universidad y gracias a Tomas comencé a trabajar como maestra de Educación Especial en la Escuela Roberto Clemente en Bridgeport. Cuando Tomas se transfiere a New Haven me ofrece un trabajo de maestra de Educación Especial en la Escuela Wexler. Tomas, nunca dejó de ser mi mentor, mi amigo. Hoy recuerdo al hombre abnegado, educador, consejero, visionario, amigo y sobre todo defensor de los derechos de nuestros niños.
Myrna Rosa
Tomas el gran amigo. En el 2005 nuestra hija estuvo gravemente enferma.
Tomas llegaba al hospital todos los días y se sentaba junto a nosotros sin decir palabra para darnos apoyo emocional. Su presencia era suficiente para que nosotros nos sintiéramos tranquilos. Años más tarde nuestra hija decide celebrar su boda en Cancún y tan pronto se lo comunicamos a Tomas el acepto estar presente. Tomas siempre fue un gran amigo de la familia. Recordamos las largas horas que pasaba conversando con nuestro padre. El compromiso de Tomas era por las causas que creía justas, las cuales defendía de manera desinteresada hasta lograr su objetivo. Lo vamos a extrañar profundamente.
Joe & Blanca Rivera