El ataque perpetrado con una pistola por el sospechoso de la raza blanca Jason Eaton de 48 años en contra de tres indefensos estudiantes universitarios de origen palestino todos ellos de 20 años en las vecindades de la Universidad de Vermont, ha causado estupor nacional, pero especialmente en Connecticut y el colegio Trinity de Hartford donde una de las víctimas. el joven Tahseen Ali Ahmade, es estudiante de matemáticas.
Tanto Tahseen como su amigo Awartani recibieron tiros de pistola en sus torsos y por ahora se desconoce la gravedad de las heridas que recibió Tahseen quien ha recibido tratamiento en Vermont. Lamentablemente en el caso de Awartani una de las balas se le incrustó en su espina dorsal y no volverá a caminar. Por su parte, y de acuerdo a las recientes informaciones, el tercer estudiante Abdalhamid está fuera de peligro y se espera una completa recuperación.
El asalto ocurrió el pasado sábado 25 de noviembre a las 6:25 de la tarde cuando los tres amigos se dirigían a la casa de una familiar para disfrutar de una cena. Lucían la bufanda de color negro y blanco típica de los países árabes y hablaban en esa lengua cuando el Jason Eaton se acercó insultándolos y les disparó cuatro tiros con una pistola.
En el contexto del actual conflicto entre el estado de Israel y el grupo Hamas que representa a los 2.3 millones de palestinos que viven en lo que ha sido denominado el campo de concentración de Gaza, el conflicto ha repercutido en los Estados Unidos, Europa y en naciones de todo el mundo con demostraciones multitudinarias en apoyo a Palestina y también las contra manifestaciones de los partidarios de la política bélica y agresiva de Israel que fue la respuesta del primer ministro Benjamín Netanyahu al violento y sorpresivo ataque perpetrado por Hamas el pasado 7 de octubre en contra de asistentes a un festival donde se produjeron muertes y el secuestro de más de 200 rehenes.
Eaton se declaró inocente este pasado lunes de las acusaciones que han hecho la policía de Vermont y de los investigadores especiales del FBI.
Lo que se sabe acerca de él, de acuerdo a informaciones proporcionadas por su madre Mary Reed, es que este sujeto ha tenido múltiples problemas en su vida principalmente depresión, pero es muy religioso y lee constantemente la Biblia. Eaton es ahora sospechoso de tres intentos de homicidio, aunque tenía permiso para portar su arma.
Si bien la noticia del asalto armado a tres jóvenes palestinos resaltó en las cadenas noticiosas nacionales y en las redes sociales, Hartford, la capital del estado y donde el Colegio Trinity está localizado en el número 300 de la calle Summit, fue impactado por la situación de Tahseen Ali Ahmade que llevaba a cabo sus estudios subgraduados en esta institución educacional fundada en 1823 como Washington College, pero que cambió su nombre actual en 1845.
Ya el domingo pasado, estudiantes del colegio viajaron a Vermont para interiorizarse del estado de salud de su compañero que es descendiente de palestinos y establecer contactos con el personal medico y la familia del herido.
Por su parte Joanne Berger-Sweeney, la presidenta del colegio y profesora de la entidad envió una carta oficial a los padres de los 2,205 estudiantes informando del suceso y de las medidas que las autoridades de la institución están tomando para lograr la completa recuperación de Ali, uno de los 2,167 estudiantes subgraduados de esta casa de estudios.
La población estudiantil de Trinity college la componen un 62.1% de estudiantes blancos, un 12.6 % de estudiantes extranjeros no residentes y un 9.4% de estudiantes hispanos.
Tanto Luke Bronin el alcalde de la ciudad, el gobernador Ned Lamont y otras autoridades lamentaron estos crímenes basados en Islamofobia y Antiárabes, extraños a la tradición multicultural de las Universidades de Hartford, la Universidad de Connecticut, Saint Joseph y del colegio Trinity.
La reciente noticia que llega a Hartford a través de redes sociales y la prensa del estado y nacional, ha dado a conocer que una de las víctimas, Awartani, no podrá nuevamente caminar, penosa información cuando este odioso asalto coarta las posibilidades físicas y emocionales de un joven de 20 años.
“Los Estados Unidos viven un periodo de creciente convulsión interna provocado principalmente por la influencia en el colectivo de esta nación compuesta de muchas razas; por los constantes mensajes de odio en contra de árabes, asiáticos, afroamericanos y latinos enviados a través de redes sociales y los medios de comunicación por simpatizantes de grupos islamofóbicos, neonazis y antiárabes. Estas venenosas declaraciones son también amplificadas por las irresponsables amenazas diarias del expresidente Donald J. Trump en contra de autoridades judiciales y quienes no sean blancos,” escribió Jason Willick. Las mentes de individuos emocional o mentalmente inestables con acceso a armas de fuego como es el caso de Jason Eaton, son un peligro constante y lo continuarán siendo hasta que la justicia basada en la Constitución de los Estados Unidos, castigue a quienes, amparados por el derecho a expresar opiniones en una país democrático, envíen diariamente sus amenazas a la democracia.